El hostigamiento, la persecución y la detención son procedimientos utilizados por los cuerpos de seguridad contra cualquier persona que exprese su opinión y que ésta no sea favorable al régimen, como ha quedado demostrado con la detención de Nicmer Evans, conocido politólogo y director del portal web Punto de Corte.
Así lo dijo el politólogo Piero Trepiccione, al ser entrevistado por Elimpulso.com, en relación con este hecho registrado el lunes, en Caracas, después que Evans denunciara que su esposa, Marta Cambero, también politóloga; y el resto de su familia había estado secuestrada, durante cuatro horas, dentro de su residencia por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) y la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim). Y luego de ser detenido su abogado, Alvarado Herrera, se lo llevaron también a él.
Ya emitir una opinión se ha convertido en un delito con mayor pena que los cometidos por delincuentes que atentan contra la propiedad o la vida de inocentes personas, comentó Trepiccione.
Lo más grave, aseguró el especialista, es que se está aplicando, pero hacia un lado, la Ley contra el odio, la convivencia pacífica y la tolerancia, añadió. Está dirigida a la disidencia solamente.
«Porque en programas de televisión, personeros del gobierno, ofenden, discriminan, descalifican e incurren en todos los conceptos que contempla esa ley, sin importarles el horario de transmisión. Es un lenguaje vergonzoso el que usa, pero para ellos ni siquiera hay amonestación alguna«.
Evidentemente, la imposición de esa ley, que se puso en vigencia desde el 8 de noviembre de 2017 cuando fue publicada en Gaceta Oficial, es el instrumento que tiene el régimen para silenciar a quienes se atreven a formular críticas o analizar la gestión de los funcionarios públicos.