Los bajones de luz que se registran, en forma cada vez más recurrente en todo el territorio nacional, puede convertirse en un factor que en cualquier momento puede poner en alto riesgo la data o información que usted guarda en sus equipos, de acuerdo con el criterio de los especialistas.
En efecto, en un hogar un “bajón” de luz puede provocar el “parpadeo” de los bombillos o que se apaguen los electrodomésticos, pero la situación es diferente en empresas de telecomunicaciones, data center o entidades bancarias, donde las variaciones del flujo eléctrico pueden ocasionar daños en servidores, discos duros, centros de cómputo e, incluso, pérdida de datos relevantes para su operatividad.
Julio Rodríguez, ingeniero senior en el área de Automatización y Monitoreo de la Corporación Solsica, explica que la inestabilidad de la energía afecta en diferentes formas a los equipos eléctricos y electromecánicos (que tienen un motor como parte de sus componentes, contactores, relés, sensores, entre otros) y ocasionan daños en sus piezas internas, como el recalentamiento, porque se paralizan los electroventiladores o se dañan compresores, que acortan el tiempo de vida útil de los equipos.
Advierte el especialista que sectores como la salud y alimentos son altamente sensibles a variaciones eléctricas, por lo que recomienda tomar las medidas preventivas correspondientes.