El Tribunal Supremo de Justicia es ilegítimo porque una gran parte de sus magistrados fueron escogidos, después de ser electa la Asamblea Nacional, por ser militantes del Partido Socialista Unido de Venezuela y no por méritos profesionales.
Esos magistrados express, dice el doctor Joel Rodríguez Ramos, abogado constitucionalista, fueron los que nombraron a los «falsos directivos del Consejo Nacional Electoral, acto que atropella a la democracia, desecha la Constitución de la República y las leyes que rigen la materia».
«No podía un TSJ ilegítimo nombrar la directiva del CNE porque ya existía una comisión legislativa consensuada, que debía recibir las postulaciones y que tenía su tiempo para hacerlo».
Agregó, tampoco se produjo la omisión legislativa, como se pretende alegar para darle constancia al acto írrito, que desde luego hace más firme el convencimiento que tienen las democracias del mundo de que aquí existe una tiranía, porque lo que hace el TSJ está en concordancia con lo que decide Miraflores.
Esos cinco directivos del CNE del régimen, no garantizan imparcialidad, ni independencia, ni pueden merecer respeto porque han sido irrespetuosos con la Constitución y las leyes, actuando de la forma más arbitraria que se conozca, dijo.
Muy distantes están de quienes fueron dignos rectores electorales como Eduardo Arroyo Lameda, Manuel Rafael Rivero, Carlos Delgado Chapellín. Isidro Morales Paúl, entre otros, quienes demostraron ser independientes y eran muy respetados por todas las organizaciones políticas porque su comprobada imparcialidad quedó demostrada en todas sus actuaciones.