La pandemia de la Covid- 19 ha radicalizado los problemas en los servicios públicos en Venezuela. Crisis eléctrica, de aseo urbano, escasez de combustible y agua potable, mantiene en constante tensión a los ciudadanos quienes no pueden «quedarse en casa» ante la gran cantidad de calamidades que enfrentan cada día.
De acuerdo con datos aportados por el Observatorio Venezolano de Servicios Públicos (OVSP), 64% de los ciudadanos no cuenta con agua suficiente para la higiene preventiva ante la Covid- 19.
El estudio, realizado entre abril y mayo de 2020, reveló que «64,7% de los habitantes de 10 de las principales ciudades evaluadas (Caracas, Valencia, Punto Fijo, Maracaibo, Barinas, San Cristóbal, Ciudad Bolívar, Barcelona, Porlamar y Barquisimeto) no cuenta con agua potable para aplicar las medidas de higiene recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) a fin de enfrentar los efectos de la pandemia».
En este contexto, «68% de los ciudadanos valoraron negativamente el servicio de agua, cifra que representó una desmejora de dos puntos porcentuales respecto a la encuesta realizada (también por el OVSP) en diciembre de 2019″.
Estos resultados evidencian que el suministro de agua potable es el servicio público peor evaluado por los ciudadanos, toda vez que han fracasado las promesas de distribución de las autoridades regionales.
¿Qué pasa en las regiones?
Cada vez es más común observar a los venezolanos caminar por las calles con algún tobo en la búsqueda de agua. Pagar un cisterna se ha vuelto una práctica común en algunas urbanizaciones pese a los elevados costos.
Esta realidad ha golpeado a Caracas y el resto de las regiones del país. ElImpulso.com en alianza con TalCual, La Nación, La Mañana, La Verdad, Yaracuy al Día, Correo del Caroní y Runrunes, obtuvo un reporte general de las condiciones del suministro de agua en las que se encuentra la ciudad capital y los estados: Bolívar, Falcón, Miranda, Táchira, Vargas, Yaracuy, Zulia y Lara.
En Caracas, 36% de las protestas en abril fueron por agua. Además, Distrito Capital recibe 10 mil litros de agua por segundo, 50% menos que hace 10 años.
En el Zulia las comunidades esperan de 3 a 5 meses por el suministro de agua potable. Y en cuarentena, 87% de las familias manifestaron tener problemas con el suministro.
En Yaracuy la realidad no es distinta. De acuerdo con datos periodísticos, la empresa Aguas de Yaracuy ha admitido tener problemas con la captación de agua en más del 90 %, aunado al efecto negativo de las fluctuaciones eléctricas en las zonas de bombeo.
En Táchira sobran las calamidades. Los camiones cisternas que abastecen a las comunidades cobran con gasolina o pesos. Las comunidades tachirenses reportan hasta 20 días continuos sin suministro de agua.
Por su parte, 55% de las familias en el estado Bolívar almacenan agua debido a la inconstancia en la dotación de agua por tubería. Las fallas son críticas en más del 60% de la región.
Solo en el mes de mayo, se reportaron 12 protestas por escasez de agua en Coro, estado Falcón. Quienes viven en la Península de Paraguaná deben caminar más de un kilómetro para obtener un poco de agua.
La misma situación se vive en el estado Lara. Hidrolara ha enfrentado serios cuestionamientos debido a las fallas en la distribución y pagar un cisterna implica una inversión de entre 15 y 50 dólares.
La deforestación e incendios en el Parque Nacional Terepaima es motivo de alarma, por cuanto en esta zona se encuentran las nacientes de agua que abastecen a parte del estado.
En medio de la actual pandemia por la Covid- 19 contar con agua suficiente para cumplir los protocolos de higiene cobra una relevancia muy significativa. Sin embargo, la recomendación de la OMS contrasta con esta realidad alarmante.