El cierre de casinos en Nevada a causa del coronavirus ha llegado a su fin. Se repartieron cartas, rodaron los dados y las máquinas tragamonedas volvieron a emitir luces y sonidos para los primeros clientes que regresaron a apostar el jueves en Las Vegas y en todo el estado.
“Los últimos meses han presentado a nuestra ciudad un desafío sin precedentes”, dijo Derek Stevens, propietario de dos casinos en el centro de Las Vegas, los cuales se vieron obligados a cerrar junto con todos los establecimientos de apuestas en marzo. “Estamos emocionados de traer a nuestros empleados de vuelta al trabajo y de dar la bienvenida a la gente a la capital mundial del entretenimiento”.
Los hoteles y casinos en el centro de Las Vegas y sus alrededores fueron los primeros en reabrir sus puertas en el primer minuto de la madrugada del jueves. Horas después, la fuente del Bellagio volvió a funcionar, así como varios hoteles en la famosa franja de la ciudad The Strip.
Una de las dos propiedades de Stevens en el centro de las Vegas, el D Hotel and Casino, tenía una fila de varias decenas de personas esperando a que abrieran las puertas poco después de la medianoche. Luego de que se revisó la temperatura a los clientes en la puerta, el casino estaba lleno de apostadores y otros clientes, mientras que los empleados del casino portaban mascarillas y otras protecciones en el rostro. Incluso una camarera que bailaba encima de una barra en lencería portaba una mascarilla.
Mike Gebhradt, trabajador de servicios públicos de Cincinnati, viajó a Las Vegas el jueves por la mañana con su hermana y su prometido en un viaje de cumpleaños en un vuelo que estaba sorprendentemente lleno. Caminó por las aceras de The Strip, mayormente vacías, antes de la apertura de varios casinos.
“Va a ser un poco diferente, pero así son las cosas ahora”, comentó Gebhardt, quien se describió como un jugador de blackjack.
Wynn Resorts postergó su reapertura a un horario diurno como muestra de respaldo a las continuas protestas nocturnas por la muerte de George Floyd ocurrida en Minnesota.