En concordacia con el más reciente informe de la Unicef Venenzuela, se distribuyeron más de 90 toneladas de suministros médicos en 189 centros de salud del país, correspondientes a 13 estados. Ente éstos hay 38 centros centinelas, llamados así para identificar los que atienden específicamente casos positivos de COVID-19.
Según en el informe, no solo se distribuyeron insumos relacionados a la atención médica, sino también recursos en los sectores agua y alimentación, servicios considerados como más vulnerables por la población venezolana.
Detallaron que se equiparon 10 hospitales prioritarios con equipo de protección personal, medicamentos esenciales, energías renovables y equipos médicos. Además recalcaron que «Unicef también apoya los esfuerzos para mantener y ampliar los programas de alimentación escolar. Durante la cuarentena por la COVID-19 se ha beneficiado a 46.000 niños en Miranda, Distrito Capital, Zulia y Táchira.”
En el documento también se refirió la situación de los servicios públicos en el país, que sigue siendo el mayor reto de los venezolanos. Por ejemplo, en zonas de los estados Táchira, Mérida y Bolívar se reportan apagones de más de 12 horas, según el citado informe, y además del servicio de agua que falla en gran parte del país, se le ha sumado la escasez de gasolina.
La Unicef hizo referencia en su informe a que un gran número de venezolanos ha retornado al país durante la pandemia debido a la crisis económica que les tocó enfrentar en los territorios donde se encontraban, principalmente Colombia, Ecuador y Brasil.
Indican que desde marzo, las autoridades colombianas reportan que han regresado a Venezuela por Táchira aproximadamente 34.000 personas.