Para recordar:
“Y fue lanzado fuera el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero; fue arrojado a la tierra, y sus ángeles fueron arrojados con él”
(Apocalipsis12:9)
Según el libro de Apocalipsis, el dragón, la serpiente antigua es el diablo o Satanás. Y también se afirma allí, en tal capítulo, que arrastró con él la tercera parte de los ángeles del cielo.El mismo Jesucristo (Miguel) con sus ángeles,luchó contra el diablo y sus demonios.Y la desproporcional caída, es porque fueron enviados a esta tierra para tratar de afectarla en todo, con tan pocos habitantes, comparados con ellos.
El diablo trata de inculpar a Dios por todo lo que ocurre y por ello engañó a esa tercera parte de los ángeles, diciendo que el Eterno era malo, dictador, autócrata, inmisericorde y cuanto se le pudo ocurrir.
Tal vez por eso, el “engaño”, descrito en el verso 9 de Apocalipsis 12, es el verbo más sugestivo narrado allí,por la actividad que los maléficos están haciendo a nuestro planeta. El engaño es lo que pulula en cualquier ámbito y esos ángeles malos se mete en todo para dañar la: Economía, paz, salud, educación política, sociedad, religión entre otros.
Lo desproporcional, también, se muestra en lo vulnerables que somos los seres humanos. Por ejemplo, con la aparición del coronavirus vimos sucumbir de inmediato al mundo entero, o por lo menos la tierra se vio convulsionada y grandes economías perdieron, y siguen perdiendo millones de sus monedas de uso oficial. Se han perdido vidas, miles de empleos; empresas, alimentos y mucho más.
Volviendo al engaño, es uno de los verbos más utilizados en el planeta; pero los políticos se llevan una gran medalla en este asunto. Por ejemplo, en Venezuela, antes de la aparición del corona virus ya no había gasolina en este país. Aunque el pueblo ha acatado la cuarentena y continúan los días de parálisis, presuntamente se está usando como comodín para tapar la falta de producción de dicho combustible.
Y aunque Venezuela tenía la gasolina más barata del mundo, después de tantos días con vehículos parados sin consumir, tal combustible no aparece y para colmo el virus no desaparece. Mientras tanto, se presentaron los usureros, vendiendo la gasolina en moneda extranjera, convirtiéndola en una de las más caras del planeta.
Por ello se presume, que el gobierno nacional está instalando surtidores para cobrar el litro de gasolina a 0,69 de dólar (unos 124.200 bolívares, al cambio, al momento de escribir). Pero ¿acaso en Venezuela se gana en dólares? Esa no es nuestra moneda oficial, aunque muchas transacciones se están haciendo en dicha moneda.
Otra desproporcional caída, es la económica y se observa cuando el ciudadano común no gana más de $ 4 (cuatro dólares) al mes y ¿cómo se pretende cobrar la gasolina a ese precio de 0.69, o más? Y peor aún, hace poco, ya salió publicado que el gobierno regional, acá en Lara, aumentó o aumentará el gas tres veces más su valor.
Es lamentable, que teniendo este país una de las mayores reservas de gas en el mundo, la bombona de 10 Kg, pasará de Bs 20.500 a Bs 65.000; la de 18 kg, de 37.500 costará 120.000 bolívares, por ejemplo. Y con el sueldo de 850.000 ¿se podrá sobrevivir así, y qué dejamos para la alimentación, salud, educación, transporte, y mucho más?
Es un hecho que la serpiente antigua, la que engaño a Adán y a Eva, en el Edén,seguirá engañando (Mateo 24:24), para que culpemos a Dios de todos los males de esta tierra. Bien lo dijo el profeta: “Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano”. Porque si nos volvemos a Dios,Él tendrá misericordia, y será amplio en perdonar. (Isaías 55:6,7).
Eduardo Iván González González
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