Y así de repente, un día le cambio la vida a toda la humanidad, como una ola gigantesca de un tsunami que baño al mundo entero gracias a un virus llamado el Covid-19. Nos cambio por completo la vida a todos y veo lo que acontece en distintos países y en el mío propio y aun no puedo creerlo.
A muchos les oído decir, que se trata ya del comienzo del apocalipsis. Yo no, pienso mejor en que esto puede ser un caso para el aprendizaje personal y colectivo, que es un caso para la resiliencia y una experiencia que nos toco vivir, a todos sin excepción. Pero lo cierto es que nos cambio el paso de cada uno de nosotros por este planeta. ¿Lo merecemos?, no lo se. ¿Somos culpables?, no lo se. Pero lo que si es cierto es que este enemigo invisible lo tenemos muy cerca de cada uno de nosotros y es un enemigo real y letal, que puede atacar a cualquiera sin piedad, llega silencioso y nos abraza si estamos descuidados.
Entonces vienen a mi mente muchas situaciones, como por ejemplo que ocurrió con las grandes potencias, que paso en países desarrollados como Italia, España, Francia y Estados Unidos, cuyo orden social ha sido ejemplo para el mundo, que fue lo que en realidad ocurrió en China. No ando buscando culpables solo son mis interrogantes y no encuentro las respuestas. Vemos entonces que la humanidad simplemente no estaba preparada para este horror.
Pero aun nos queda una carta por jugar y es una muy importante la del rol del ciudadano ante la pandemia. Ahora si que debemos ser ciudadanos a cabalidad y desempeñar ese rol, pues ahora no es un simplemente un concepto abstracto que leemos en un libro, ni una teoría, es el ciudadano en pleno ejercicio y cumplimiento responsable de la normativa mundial que se nos impone en los actuales momentos y que debe ser acatada con mucha conciencia para frenar el crecimiento por contagio de un virus letal que ya esta afectando fuertemente a todos los países sin excepción.
Hoy día esas normas de confinamiento, de guardar la distancia, del lavado de manos, del uso del tapaboca y otras recomendaciones sanitarias que se deben cumplir a nivel mundial de manera estricta, entre los ciudadanos para evitar el contagio y la propagación de la terrible pandemia mortal, no surge del capricho ni de la imaginación de algunos, ni son métodos improvisados, la normativa actual surge de la Declaración del Comité de Emergencia convocado por el director de la Organización Mundial de la Salud con fundamento al Reglamento Sanitario Internacional (RS 2005) dicho comité ofrece asesoramiento en materia de salud publica. Este comité se reunió el 22 de Enero del 2020 vía teleconferencia en Ginebra. Muchas recomendaciones surgieron de allí, las mas importantes que ya todos conocemos son las dirigidas a evitar el contagio entre personas guardando el aislamiento, estando en nuestras casas confinados, esa es la medida mas dura y mas difícil de cumplir, pero es la principal pues la pandemia como tal no tiene cura, en los actuales momentos, varios países se encuentran estudiando y elaborando algunos ensayos tratando de encontrar la vacuna y cura definitiva, para frenar esta pesadilla, pero lo único que realmente esta en nuestras manos es evitar el contagio y a este tema voy hacer especial referencia junto a nuestro rol de ciudadano porque los venezolanos somos muy sociables, familiares , nos encantan las reuniones, las actividades en grupo y compartir nuestro tiempo entre amigos, pero en los actuales momentos ese compartir puede ser terrible para todos nosotros y aunque muchos no lo crean por un sencillo compartir y hablar con alguna amistad cerca de nosotros podemos contagiarnos de este virus mortal, no podemos en los actuales momentos y de acuerdo a la normativa tener actividades en grupos, pues simplemente estaríamos ayudando al contagio de unos con otros, pues así se desarrollan las pandemias, que como ya hemos visto el llamado Covid-19, no ha respetado ni a reyes, ni a príncipes, ni actores, ni presidentes, ni ministros, ni deportistas, ni a nadie, es una enfermedad que no discrimina, ataca a cualquiera y es allí donde entonces entra nuestro compromiso ciudadano y el rol que a cada uno de nosotros ahora nos toca cumplir, “Quédate en casa”, es la principal recomendación, el aislamiento y el uso del tapaboca si imperiosamente tienes que salir, no puedes hacer actividades en grupo, fíjate que en los establecimientos ya han colocado hasta el metro de distancia que debes guardar en los supermercados, debes ser muy responsable, pues la enfermedad es tan peligrosamente silenciosa que a veces no da síntomas pero si contagia y un asintomático puede contagiar a tres personas.
Como ciudadanos responsables nos toca también exigir el cumplimiento de tales normas en los edificios y conjuntos residenciales donde hacemos vida, la prohibición de actividades en grupo, fiestas y otras, hablar con los niños y jóvenes quienes son los que menos entienden lo que esta aconteciendo y hacerles entender que en los actuales momentos no estamos de vacaciones ni es tiempo de compartir actividades en grupo, que debemos estar conscientes de que la enfermedad anda por ahí al acecho, inclemente y sin piedad.
Seamos entonces los adultos cumplidores del rol que ahora nos toca ejercer y es el de ser ciudadanos responsables y cumplidores de toda una normativa internacional que ya esta siendo acatada por todos los países del mundo y desde luego por Venezuela, cuídate y no ayudes a propagar el contagio. Y jamás perdamos la fe, si nos ayudamos y nos protegemos saldremos adelante.
Astrid Liscano de Raad