Al doctor José Toro Hardy, economista y experto petrolero, no le llama la atención la decisión de Nicolás Maduro, de nombrar a su vicepresidente económico, Tareck El Aissami, como ministro de Petróleo y a Asdrúbal Chávez, quien ocupara ese cargo entre 2014 y 2016, presidente de Petróleos de Venezuela, S A. ( Pdvsa).
“El Aissami tiene cero experiencia en petróleo y Chávez, conoce de petróleo, pero es cómplice de la destrucción de Pdvsa”, comentó al ser entrevistado por Elimpulso.com.
A Pdvsa la destruyeron, expresó el experto petrolero, refiriéndose al régimen de Hugo Chávez y Maduro. Sus refinerías se encuentran, prácticamente, paralizadas después que se les hicieron un daño impresionante.
Es de señalar que Asdrúbal Chávez, además de ministro en materia petrolera, tuvo a su cargo la responsabilidad de presidir a Citgo, la principal compañía de Pdvsa en el exterior.
Con esas designaciones, apunta nuestra redacción, sale de ambos cargos el general Manuel Quevedo, quien en 2014 era jefe de la Guardia Nacional en Caracas y dirigió las operaciones contra las manifestaciones de ese año. Después fue nombrado ministro de la Vivienda y como tal dirigió la Gran Misión Vivienda Venezuela, durante dos años. Y en noviembre del 2017 cuando asumió las funciones de ministro de Petróleo y presidente de Pdvsa, ésta ya había perdido 800 mil barriles de producción de crudo y estaba produciendo dos millones de barriles diarios.
Sin embargo, el objetivo de recuperar la producción y la empresa no lo cumplió. El lunes de esta semana, apenas se estaban produciendo 600 mil barriles diarios y la escasez de gasolina, que no había tocado a Caracas hasta las últimas tres semanas, se ha generalizado.
Al respecto, dice Toro Hardy, que con la salida de Quevedo, los militares han perdido una cuota de poder.
Crisis general
Si la empresa hubiera mantenido el ritmo administrativo que tenía al momento en que asume el poder Chávez, hoy día estaría produciendo 5 millones de barriles de crudo diariamente y se hubiera mantenido Pdvsa como una de las principales compañías del mundo, ya que para entonces sólo era superada por la Aramco, de Arabia Saudita.
El último intento por recuperar una de sus refinerías, la de El Palito, en el estado Carabobo, fue un fracaso.
No encuentra explicación el doctor Toro Hardy en el nombramiento de El Aissami como ministro de Petróleo, por cuanto este funcionario fue sancionado en el 2017 por los Estados Unidos como involucrado en el tráfico de drogas y en marzo de este año se le puso una recompensa de diez millones de dólares por su captura.
Se trata en todo caso de buscar un enfrentamiento con los Estados Unidos, dijo el especialista, quien no cree que ninguno de los dos funcionarios pueda, como se explica en el documento mediante el cual se hace las designaciones, reestructurar, recuperar y transformar a la industria petrolera.
Esas funciones se las encargó Maduro, el 19 de febrero, a la comisión presidencial Alí Rodríguez Araque, encabezada precisamente por El Aissami y Chávez, en la cual también están incluidos el ministro de la Defensa, Vladimir Padrino; el comandante estratégico operacional de la Fuerza Armada, Remigio Ceballos; los ministros de Transporte, Hipólito Abreu; Ciencias y Tecnología, María Gabriela Jiménez; y Trabajo, Eduardo Piñate, y un grupo de sindicalistas.