Informaciones extraoficiales indican que el peligro del coronavirus ha hecho regresar por la frontera colombo-venezolana a 6 mil venezolanos y se espera que, para este fin de semana, lleguen cuatro mil más.
Lamentablemente, declaró para Elimpulso.com, Williams Dávila, diputado de la Asamblea Nacional y miembro de la Comisión de Política Exterior, vuelven al país que se encuentra en peores condiciones a las que existían cuando se fueron, porque no sólo se han profundizado los problemas que ya existían, sino que no hay gasolina.
Situación desgarradora
Regresan con los pocos ahorros, producto del trabajo y sacrificios que hicieron, los cuales ahora serán consumidos vorazmente por la hiperinflación y, al mismo tiempo, sus familiares empeorarán su modo de vida, porque ya no recibirán las remesas que les enviaban esas personas.
Tendrán problemas muy serios, porque sus parientes deben ser alimentados, pero no hay trabajo, además que la pandemia del coronavirus Covid -19 ha ocasionado una cuarentena que nadie sabe cuándo terminará. Esta es una situación desgarradora porque la peor amenaza que tiene la población es la del hambre, porque si había baja producción ahora será peor porque la falta de gasolina para las actividades del campo está profundizando la crisis económica y por supuesto, incrementando la hiperinflación, que ha impuesto el dólar como referencia de valor y desplazando al bolívar, que cada día penosamente vale menos.
Carencia asistencial
No existen en Venezuela centros acondicionados para recibirlos y mantenerlos aislados mientras se determina el estado de salud de cada uno de estos compatriotas, ni tampoco se dispone de laboratorios para que hagan los exámenes pertinentes. Sólo hay uno, en Caracas, a donde envían las pruebas de todo el país.
Actuación del ELN
Llama la atención, dijo el diputado, que individuos encapuchados y provistos de armas de gran potencia, señalados como integrantes del grupo terrorista Ejército de Liberación Nacional (ELN) hayan asumido, arbitrariamente y violando la Constitución, una función detestable como es la de estar obligando, en San Antonio, la ubicación de estos venezolanos en escuelas, que no reúnen las condiciones para el aislamiento de personas, porque las instalaciones carecen de agua, gas, energía eléctrica y, por supuesto, camas y todo lo adecuado para que puedan permanecer dignamente viviendo una situación de emergencia.
Igualmente no hay instalaciones en el resto del país para albergar a los migrantes que regresan, motivo por el cual se han visto ´por la zona panamericana de Mérida a personas que han regresado por Cúcuta, tratando de llegar a su domicilio.
Nos llegan denuncias contra los guardias nacionales, quienes humillan a los que regresan. Pero, esto está ocurriedo en todo el país, porque de todas partes emigraron.
Plan José María Vargas
En este orden de ideas, el diputado Dávila se refirió al plan presentado por Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional y reconocido por casi 60 países democráticos como jefe del Ejecutivo Nacional, denominado doctor José María Vargas, el cual consiste en lograr insumos para el personal médico y hospitales, así como la ayuda humanitaria para enfrentar el Covid-19, un crédito internacional para atender familias vulnerables, además de dotar de agua a los centros hospitalarios mediante un programa de obras hidráulicas.
Es insólito que la clase militar se oponga al ingreso de la ayuda humanitaria solicitada por Guaidó; pero, sí brinde apoyo a la que ofrecen los aliados chinos y rusos al régimen, que no tienen la enorme dimensión de la de Guaidó. Se está agravando el problema humanitario en Venezuela, lo que es muy preocupante en este momento de calamidad nacional, expresó.