#OPINIÓN Del Guaire al Turbio: Silencio #15Abr

-

- Publicidad -

Callamos todos. Hemos vivido una Semana Santa insólita. Ver al Santo Padre oficiar la solemne misa del Domingo de Ramos en la Catedral de San Pedro vacía, como primer impacto, fue sobrecogedor. Francisco está quebrantado, disminuido, su paso vacilante, su rostro acusa la angustia de por este silencio global lleno de dolor, se ve cansado. El después de los días santos siguió igual, pero uno se acostumbra. Llegó el Domingo de Resurrección, con su grito de alegría y esperanza, ¡que no se apague! Ya estamos en la semana de Pascua, pero el mundo sigue callado. ¿Hasta cuándo?

Debemos escrutar el silencio, ahí tenemos que encontrar una respuesta. Siempre nos dicen que en el silencio habla Dios y quizás, en este mundo escandaloso en que estábamos metidos hasta hace poco, no hemos podido oírlo. Apagamos su voz con el estruendo de nuestras vidas dedicadas al trabajo afanoso, no siempre por motivos nobles, que los hay, sino por ganar altas posiciones, dinero en abundancia, prestigio, poder. Ansiosos de diversión y sensualismo para buscar una triste felicidad perecedera, nos sometemos al ruido de los centros comerciales con afán de compras, a espectáculos, cantantes de moda, fanatismo deportivo, la publicidad de los medios de comunicación, que aun hacen más bulla especulando con noticias que provocan curiosidad malsana de un público, ávido de esas novedades subidas de tono, que escudriña en la vida privada y los pecados ajenos, para venderlos en primera página y las redes sociales. Estamos tan acostumbrados a aturdirnos con el bullicio universal que hemos olvidado el silencio y la voz del creador del universo.

- Publicidad -

La reciente historia es muy dura y vergonzosa para algunas instituciones e incluso naciones, que han resuelto resolver problemas humanos por la vía del facilismo, pasando por encima de la ética y del sentido común. Otras, han sufrido una descomposición moral de algunos de sus miembros que ha golpeado el buen nombre de la institución y su credibilidad. Es lo que le ha pasado a la Iglesia Católica con el descubrimiento de clérigos y religiosos pedófilos. No es nada nuevo, pero nunca tan extendido y divulgado, a veces con más malicia que búsqueda de justicia. Los que pertenecemos a esta Iglesia y la amamos como institución divina, fundación y esposa de Cristo, tenemos el corazón lacerado. Nos duele ver su rostro deformado por las arrugas y llagas de las miserias de sus hijos.

Dios no castiga, Dios ama y porque ama a la humanidad entera, permite el mal, que es demoníaco, para sacar un bien a través del sufrimiento. La tragedia planetaria de la pandemia actual, nos ha sumido en un silencio angustioso, interrogante: Dios, ¿dónde estás?. Llama la atención que los países más azotados por el coronavirus, Italia y España, sean precisamente los más católicos del mundo. Entonces cabe preguntarles: ¿dónde estaban antes de que los azotara esta peste? Es fácil contestarlo: en la degradación moral más grande de sus historias. Desenfreno de costumbres, leyes antinaturales, indecentes espectáculos, exhibición y exaltación, por los medios de comunicación, de vidas privadas abyectas, es decir, la proclamación del pecado como corona de gloria. Ahora tienen esta corona de dolor y los demás pueblos del mundo también, porque no estamos exentos de culpa. Sin embargo, Dios nos ama.

Aprovechemos este compás callado para entrever una visión de redención. Me valgo de alguien, inspirado en el silencio, para que nos impulse a meditar, con su torrente de palabras sin puntuación que fertilizan el espíritu, para hacerlo florecer en belleza, paz y esperanza.

Mi amado las montañas / los valles solitarios nemorosos / las ínsulas extrañas / los ríos sonorosos / el silbo de los aires amorosos / la noche sosegada / en par de los levantes de la aurora / la música callada / la soledad sonora / la cena que recrea y enamora.

(San Juan de la Cruz, Cántico Espiritual (B), estrofas 14 y 15)

Alicia Álamo Bartolomé

Pulsa aquí para apoyar la libertad de expresión en Venezuela. Tu donación servirá para fortalecer nuestra plataforma digital desde la redacción del Decano de la Prensa Nacional, y así permitir que sigamos adelante comprometidos con la información veraz, como ha sido nuestra bandera desde 1904.

¡Contamos contigo!

Apóyanos aquí

- Publicidad -

Más leido hoy

- Publicidad -

Debes leer

José Guerra: El BCV no tiene cómo detener la devaluación del bolívar #18Dic

El reconocido economista José Guerra lanzó una grave advertencia sobre la situación del mercado cambiario en Venezuela. Según Guerra, la tasa de cambio oficial...
- Publicidad -
- Publicidad -