La mayoría de los juegos de selecciones nacionales de fútbol podrían no realizarse hasta 2021 debido a las restricciones de viaje por la pandemia de coronavirus y la necesidad de darles a las competencias de clubes la oportunidad de reanudar actividades, dijo un vicepresidente de FIFA el lunes.
Victor Montagliani, el canadiense que preside la CONCACAF, ha encabezado un grupo de trabajo de la FIFA responsable de formular planes para lidiar con las implicaciones del cierre de actividades del deporte más popular del mundo desde el mes pasado.
La FIFA ya suspendió todos los encuentros entre naciones que estaban programados de marzo a junio. Montagliani cree que podrían cancelar las fechas de encuentros de selecciones nacionales en septiembre, octubre y noviembre.
“En lo personal, creo que podría ser un tanto desafiante, no tanto por los problemas de salud en todo el mundo y los distintos grados de preparación, sino también a comprometerse a realizar viajes internacionales tan pronto como volvamos”, dijo Montagliani en una entrevista con The Associated Press. “Creo que el fútbol local es una prioridad. Septiembre sigue programado, pero me atrevería a decir que no estoy seguro de que se mantenga firme con la dirección que lleva la situación en este momento”.
El regreso de los aficionados a los estadios podría depender de que se cuente con una vacuna para el COVID-19, y eso podría tomar hasta 2021.
“Si recibimos luz verde para jugar al fútbol. Dudo mucho que el primer juego sea con aficionados. No lo veo. Creo que eso sería un enorme riesgo”, comentó. “Estoy seguro de que sería algo gradual, al igual que sucederá con el resto de la sociedad en términos de volver a la normalidad”.
Una reanudación total del fútbol en 2020 podría ser imposible en algunas de las regiones más afectadas por la pandemia, incluyendo Europa y Norteamérica.
El hexagonal de CONCACAF, que determina a los tres equipos que clasifican directamente al Mundial, está programado para iniciar a finales del año, con dos encuentros por equipo en septiembre, octubre y noviembre. Estados Unidos, México, Costa Rica, Jamaica, Honduras y, ya sea El Salvador o Canadá, participarán en el torneo.
La calendarización se debatirá en un grupo de trabajo compuesto por las seis confederaciones.
“Confío en que la ventana de actividades de marzo de 2021 será aceptable”, dijo Montagliani. “La prioridad es ayudar a nuestras ligas nacionales, y luego analizar nuestros eventos.
El formato de clasificación para el Mundial de Qatar 2022 podría ser restringido debido al poco tiempo disponible para llevar a cabo los encuentros previos al certamen, que comienza en noviembre de 2022.
“Posiblemente tengamos que analizar seriamente un nuevo formato para algunos de nuestros eventos”, comentó el directivo. “Estamos comprometidos a llevar a cabo la fase final (de la Liga de Naciones). Pero tenemos otros eventos a los que quizá tengamos que cambiar de formato, ya sean algunas de nuestras competencias juveniles, e incluso las clasificaciones rumbo al Mundial, en los que vamos a tener que, de acuerdo con las probabilidades, analizar para ver como funcionarían en una situación en donde el calendario sería menor al que esperábamos”.
Montagliani sostiene que la CONCACAF goza de una buena situación financiera para enfrentar el caos en la calendarización de encuentros.
“Muchas de las cosas las podemos recuperar con el paso del tiempo. No tenemos partidos cada fin de semana como sucede con las ligas”, comentó. “Pero creo que donde se reflejará el impacto financiero en CONCACAF es con los accionistas, con las ligas y los clubes. Ahí es donde estará el mayor impacto financiero”.