La demanda de alimentos registro una caída de al menos -20% como consecuencia de las medidas aplicadas por el gobierno, con la finalidad de frenar la expansión del Covid-19, aseguró este miércoles el presidente de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios, Fedeagro, Aquiles Hopkins.
El dirigente empresarial ratificó el planteamienro que ha venido haciendo en los últimos días, en torno a la necesidad de que las autoridades, ante la profunda escasez de combustible que existe a lo largo y ancho de todo el territorio nacional, establezcan un plan de contingencia a través del cual se le de prioridad a los productores agrícolas de las distintas regiones del país, para que puedan transportar los alimentos hacia los centros de consumo, afirmando nuevamente que “sin alimentos no hay salud”, frase que se ha hecho viral a través de las redes sociales.
Admitió Hopkins que han sostenido reuniones con las autoidades militares, y que en algunos casos han tenido respuestas positivas, pero en otros casos sigue existiendo el problema, con el riesgo que algunas cosechas de productos alimenticios, podrián perderse, recordando que se trata de productos perecederos, muchos de los cuales necesitan procesos de refrigeración.
En riesgo ciclo de siembra de invierno
Asimismo, el líder del sector primario de la producción alertó nuevamente, en torno a riesgos que existen para el ciclo de siembra más importante, que es el de invierno, el cual se inicia a mediados de mayo y esta es fecha en que los agricultores no tienen semillas, fertilizantes, agroquímicos, financiamiento, repuesto para las maquinarias y equipos, indicando que de perderse este ciclo, la situación del suministro de alimentos para el futuro, estaría seriamente comprometida.
Hopkins considera que es recomendable establecer algunos planes de contingencia y hacer las proyecciones, que permitan asegurar el suministro de alimentos, una vez que se supere la pandemia del Covid-19, tomando en consideración las dificultades planteadas y los distintos escenarios que se tendrían que enfrentar en el mediano y largo plazo, en torno lo que comerán los venezolanos.
