Médicos, transportistas, funcionarios de cuerpos de seguridad del Estado, entre otros, esperaban este jueves a las afueras de estaciones de gasolina para abastecer sus vehículos de combustible y poder prestar sus servicios a la sociedad, los cuales fueron exceptuados de la cuarentena por el COVID-19.
En la bomba ubicada en las adyacencias del Terminal de Pasajeros de Barquisimeto se observaron largas colas de miembros de las áreas priorizadas como salud, servicios públicos, transporte, telecomunicaciones, alimentación, seguridad y prevención.
Conforme transcurrían las horas la desesperación se apoderaba de quienes se encontraban en las filas, pacientes crónicos y profesionales de la salud se bajaron de sus automóviles para tratar de dialogar con los efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana, ante la urgencia de obtener combustible.
A pocos metros otra cola pero de camiones cisternas esperaba por el mismo objetivo, sus conductores manifestaban la necesidad de cargar sus tanques de gasolina para poder distribuir agua a las comunidades, principalmente a aquellas que no reciben el vital liquido por tubería o donde el servicio presenta mayores fallas.
Transcurridas las 2:00 de la tarde funcionarios de seguridad informaron a los presentes que la gasolina se había terminado, lo que generó decepción en quienes tenían la esperanza de poder obtenerla.
En la estación de servicio La Campiña ubicada en el municipio Palavecino, la cual este jueves ofreció abastecimiento de combustible al sector alimentario, un grupo de médicos y enfermeros mostraron su inconformidad por las dificultades para obtener gasolina.
«Tengo como tres días tratando de surtir gasolina y no he podido, estoy enterada de que esta es la única bomba que esta surtiendo al sector salud, ayer cuando nos correspondía una falla eléctrica impidió que lo pudiéramos hacer y por esa razón estamos hoy aquí desde las 4:00 de la mañana», declaró Katherine Beetrano a Elimpulso.com