La Comisión Económica para América Latina, conocida como CEPAL, no tiene dudas de que la pandemia del virus golpeará la economía regional, tanto en el sector comercial como en el financiero. Lo que aún no sabe es cómo sería el efecto y qué magnitud tendría.
En una video conferencia sobre los efectos del coronavirus en la región que fue organizada por el Consejo de las Américas, Inés Bustillo, directora de la oficina de Washington de la CEPAL, expresó el jueves que “hay mucha incertidumbre sobre el impacto económico”.
“Esperamos que el crecimiento sea menor”, agregó tras aclarar que aún es muy pronto y no se han revisado los pronósticos de apenas por encima del 1% para este año.
Según Bustillo, en lo comercial el impacto se verá fundamentalmente por la fuerte relación que los países mantienen con China, el primer territorio afectado por el virus. A nivel regional, el 10% de las exportaciones van a China y el 18% de las importaciones provienen de ahí.
Los más perjudicados, agregó, serán los países cuyas economías se sustenten en los recursos naturales como los granos, el petróleo, el cobre y el níquel; y en el turismo.
En América Latina hay registrados más de 160 casos en al menos 12 países y ha habido dos fallecimientos: uno en Argentina y otro en Panamá.
La Organización Mundial de la Salud declaró esta semana que el COVID-19 ya es una pandemia.
A lo largo del jueves, la mayoría de los países que registran contagios anunciaron medidas más estrictas de control de viajes, cuarentenas y suspensión de actividades públicas. La excepción es México, que sólo pospuso hasta septiembre una feria turística.
Ecuador, donde hay 19 casos, dos en estado crítico, decretó la suspensión de clases en todos los niveles educativos por tiempo indefinido y actos públicos multitudinarios. Además, los partidos de fútbol se realizarán sin público y se pidió a las iglesias realizar sus cultos por internet. También declaró emergencia sanitaria, lo que implica el aislamiento domiciliario de los viajeros que provengan de países con mayor cantidad de casos y la restricción a la exportación de desinfectantes, mascarillas y jabones.
Panamá registra 27 casos hasta el momento. La cifra incluye a un profesor que falleció el 8 de marzo, paradójicamente, un día antes de que las autoridades anunciaran el supuesto primer caso en el país, una panameña que llegó de Italia.
La mayoría de los pacientes tienen más de 40 años. Dos están en cuidados intensivos y otros tres hospitalizados en salas. El resto está en cuarentena domiciliar. La ministra de Salud, Rosario Turner, dijo que el incremento de los casos –el jueves por la mañana había 14 confirmados– se debe a una búsqueda intensiva y activa de personas que pudieran estar infectadas.
Minutos antes, el presidente Laurentino Cortizo anunció en cadena nacional de televisión que declarará estado de emergencia nacional, lo que permitirá poner en disposición del gobierno los recursos del Estado para enfrentar el nuevo coronavirus. También anunció medidas financieras y comerciales para mitigar los efectos económicos.
Hasta ahora están suspendidas las actividades que impliquen aglomeraciones públicas. En los colegio públicos y privados de todo el territorio panameño las clases están paralizadas y la Conferencia Episcopal anunció el jueves la suspensión de las misas sabatinas y dominicales. A las personas que llegan provenientes de países con casos de coronavirus, se les toma la temperatura y reciben vigilancia epidemiológica en su residencia u hospedaje durante 14 días.
El jueves, desde Perú, el presidente Martin Vizcarra dijo sin dar detalles que en los próximos días se realizará una videoconferencia “con los presidentes de la región” para coordinar acciones y enfrentar al virus. También ordenó la suspensión de clases en todo el territorio hasta el 30 de marzo, los espectáculos que congreguen a más de 300 personas por tiempo indefinido y postergó el pago de impuestos en los medianos y pequeños negocios del país. Según dijo, éstos se verán afectados en su economía por la pandemia.
Perú suma 22 contagiados y uno de ellos está grave: un sacerdote católico de 47 años de una parroquia del sureste de Lima que “posiblemente se contagió durante su labor pastoral”, de acuerdo a la iglesia católica. Por la noche el gobierno además anunció la suspensión de la llegada de vuelos de Europa y Asia.
En Venezuela, el presidente Nicolás Maduro prohibió las concentraciones públicas y los vuelos procedentes de Europa y Colombia. Aquí no han reportado ningún caso, a pesar de que en todos los países vecinos ya han confirmado contagios.
Horas después, el líder opositor Juan Guaidó, reconocido como mandatario interino por casi 60 países, afirmó que ante “la amenaza de esta pandemia nos obliga a tomar medidas responsables y a redefinir los llamados a salir a la calle” para protestar contra Maduro, aunque “la lucha por la democracia no se suspende”.
Argentina, donde han confirmado 31 casos, dispuso emergencia sanitaria en todo el territorio hasta fin de año y suspendió por 30 días vuelos provenientes de todos los países de Europa, Estados Unidos, Corea del Sur, Japón, China e Irán. Al mismo tiempo instrumentó “aislamiento obligatorio” durante 14 días para quienes hayan arribado al país desde las “zonas afectadas” y para las personas que revistan la condición de “casos sospechosos” o hayan mantenido “contactos estrechos” con casos ya confirmados. Quienes no cumplan con estas disposiciones se exponen a sanciones penales.
La resolución oficial también faculta al Ministerio de Salud a fijar precios máximos para el alcohol en gel, los barbijos y otros insumos críticos. “Tenemos que demostrarnos una vez más que en temas importantes estamos unidos”, dijo el presidente Alberto Fernández en un mensaje a la nación, el primero que pronuncia desde que asumió el pasado 10 de diciembre.
En Bolivia, donde hay tres casos confirmados, la presidenta interina Jeanine Áñez ordenó la suspensión de labores escolares hasta fin de mes y de los vuelos desde y hacia Europa a partir del sábado. Los eventos masivos de más de 1.000 personas, dijo, no podrán realizarse. Además, cinco de las ocho alianzas que competirán en las elecciones presidenciales del 3 de mayo anunciaron que suspenderán las concentraciones de militantes y actos de campaña.
Colombia, que ya había anunciado que las personas procedentes de algunos países como China e Italia deberán cumplir cuarentena de 14 días, también declaró emergencia sanitaria hasta el 30 de mayo.
El presidente Iván Duque dijo que con esa declaratoria se suspende cualquier evento público que reúna a más de 500 personas. Agregó que se canceló el desembarco de cruceros, especialmente en Cartagena, hasta nueva orden.
En Chile, donde hay 33 casos, el gobierno pidió a las personas que lleguen procedentes de Italia y España estar 14 días en cuarentena en sus casas.
En Cuba, las autoridades informaron que aislaron a siete personas que se relacionaron con tres turistas italianos que dieron positivo. Más tarde, las autoridades sanitarias dijeron que un ciudadano cubano fue confirmado. Suman cuatro casos en total, hasta ahora todos están fuera de peligro.
En muchas personas el nuevo coronavirus sólo provoca síntomas moderados como fiebre y tos. En algunos, sobre todo en adultos mayores y personas con problemas de salud preexistentes, puede causar enfermedades más graves como la neumonía.