El sector salud en Venezuela es uno de los más deprimidos por la crisis social y económica que vive el país. El mega apagón generado en marzo de 2019, aunque no generó muertes en centros hospitalarios, por lo menos en el estado Lara, ocasionó inconvenientes a todos los que intervienen en la salud a nivel público y privado.
A consecuencia del mega apagón que dejó sin luz a todo el estado Lara, se reafirmó la crisis en la que se encuentran la mayoría de los centros hospitalarios y ambulatorios en el estado Lara. El doctor René Rivas, presidente del Colegio de Médicos en la entidad larense aseguró que el sistema de salud no está en capacidad de soportar este tipo de contingencias.
“Con el mega apagón de marzo del año pasado verificamos lo que habíamos denunciado durante mucho tiempo. El sistema público regional y nacional de salud no cuenta con una estructura suficiente para soportar el déficit energético”, dijo Rivas, al tiempo que colocaba como ejemplo de esta situación al Hospital Central Antonio María Pineda que cuenta con una planta eléctrica que data de más de 50 años, siendo el centro hospitalario más importante de la región.
Rivas también denunció que la infraestructura hospitalaria en el estado que no cuenta con el soporte que debería estar inmerso en las políticas de salud para el desarrollo de las actividades asistenciales en cualquier centro asistencial ya sea ambulatoria u hospitalaria.
Médicos se niegan a declarar por temor a represalias
Médicos y enfermeras de toda la entidad vivieron momentos difíciles al momento de trasladarse a sus puestos de trabajo, debido a la falta de efectivo, transporte público y la escasez de gasolina que imperó durante al menos 5 días en toda la entidad. A pesar de esta situación muchos fueron obligados por las autoridades de algunos centros hospitalarios a acudir a sus puestos de trabajo.
El equipo de Elimpulso.com trató de recabar los testimonios de médicos residentes y adjuntos así como de enfermeras en los hospitales más importantes de la región, sin embargo no fue posible. Galenos y enfermeras del Hospital Central Antonio Maria Pineda y del Hospital del IVSS Pastor Oropeza, no quisieron hablar por temor a ser víctimas de represalias por las autoridades que dirigen estos centros asistenciales.
No obstante, el doctor Rody Navarro, médico emergenciologo quien fue parte del staff del Hospital del IVSS Juan Daza Pereira, mejor conocido como el Seguro La 50, detalló cómo se vivió el mega apagón del 2019 en ese centro asistencial.
“Lo más grave de esta situación fue que la planta eléctrica del Daza Pereira no arrancó. Esa planta tenía años sin mantenimiento y fue una de las cosas más incómodas de lo que vivimos. Fue desesperante vernos ante un apagón, con una planta sin funcionar y ver a la ciudadanía y la población pidiendo ayuda”, dijo Navarro.
En el nosocomio de la calle 50 se suspendieron cirugías electivas y consultas. Solo se atendían algunas emergencias.
Sin luz no hay agua: Pacientes crónicos los más afectados
Los pacientes crónicos fueron los más afectados con esta crisis generada por el mega apagón del 2019. Las personas con enfermedades crónicas vieron sus vidas en riesgo por el mega apagón. Varias de las unidades de diálisis en la entidad no cuentan con planta eléctrica y todos los pacientes no pudieron cumplir con sus tratamientos por la falta de energía eléctrica. Otros denunciaron también que por el apagón tampoco había agua. Tal es el caso de la señora Susana Mujica paciente renal y además diabética. Ella contó a Elimpulso.com que por la falta de energía eléctrica no tenía agua filtrada para poder cumplir con su tratamiento.
Susana es paciente renal. Sus tratamientos los cumple en casa porque es paciente en diálisis peritoneal. Para ello debe contar siempre con agua purificada y con el mega apagón era casi imposible tener agua en esas condiciones para poder cumplir con su tratamiento.
“No conseguimos agua, quienes estaban vendiendo agua en botellones pedían dólares y yo no tenía. Por eso hice una peritonitis aguda. Decaí demasiado. Yo soy una persona que se cuida bastante, sin embargo tuve una caída muy fuerte, por eso me mandaron antibioticos y el gasto fue muchísimo”, dijo Susana Mujica.
Susana Mujica quien es paciente del Hospital del IVSS Pastor Oropeza, también estuvo en riesgo de perder sus medicamentos para tratar la diabetes que padece. La insulina que debe mantenerse refrigerada corrió alto riesgo de dañarse. Afortunadamente pudo contar con la ayuda de la farmacia del Pastor Oropeza para conservar sus medicinas.
A un año del apagón la situación del sector salud no mejora
El Dr. René Rivas aseguró que tras el apagón del 2019 las cosas con el sector salud no mejoran. “No es solo el servicio eléctrico. El sector salud sufre con el tema del transporte a la hora del traslado de los pacientes. No tenemos ambulancias para el traslado de nuestros pacientes”, dijo Rivas.
El presidente del Colegio de Médicos del estado Lara también denunció el acoso del cual son víctimas los médicos en la entidad larense. “Es un gran problema el servicio de transporte en toda la entidad y al cual no escapan nuestro médicos y enfermeras. Vemos cómo las autoridades hacen es una cacería de brujas. En vez de emprender acciones de contingencia que busque soluciones para nuestros pacientes, comienza el hostigamiento contra el personal de salud por la hora de llegada en el hecho de las actividades asistenciales y laborales, en vez de buscar planes de contingencias que logren minimizar los efectos adversos que está sufriendo nuestro estado debido a la crisis que vive nuestro país”, enfatizó Rivas.