Los rescatistas buscaban víctimas este martes entre los destrozados vecindarios de Tennessee, menos de un día después de que tornados azotaron la ciudad de Nashville y otras partes del estado mientras las familias dormían. Por lo menos 25 personas fallecieron, informaron las autoridades.
Los tornados que se registraron horas después de la medianoche hicieron trizas 140 edificios y dejaron a la gente bajo pilas de escombros y en sótanos destrozados. Se movieron tan rápido que muchas de las personas que estuvieron en su trayecto no pudieron ponerse a salvo.
“Fue tan rápido, muchos no tuvieron tiempo de refugiarse”, comentó Randy Porter, alcalde del condado Putnam. “Muchas de estas personas estaban durmiendo”.
El gobernador declaró una emergencia y envió a la Guardia Nacional al condado para ayudar con las labores de búsqueda y rescate.
Los primeros hallazgos de los equipos de reconocimiento del Servicio Nacional de Meteorología indicaron que los daños en Nashville y en el condado de Wilson hacia el este fueron realizados por un tornado de intensidad EF3, informó la agencia.
Un tornado arrasó con las viviendas y negocios ubicados en una franja de 16 kilómetros (10 millas) en Nashville que incluyó partes del centro de la ciudad. Destruyó más de una treintena de edificios, entre ellos la torre y los cristales de colores de una iglesia histórica.
Otro tornado causó destrozos en más de 100 estructuras en un trayecto de 3,2 kilómetros (2 millas) en el condado de Putnam, arrancando algunas casas de sus cimientos y depositando los restos en sitios lejanos.
La luz del día reveló un panorama desolador: paredes y techos derrumbados, cables eléctricos rotos y enormes árboles partidos, muchas avenidas y caminos rurales bloqueados.
Las escuelas, tribunales, transporte público y un aeropuerto estaban cerrados. Más de una decena de centros de votación resultaron dañados justo antes de celebrarse las primarias demócratas en el estado, lo que obligó a los votantes del Supermartes a hacer largas filas en sitios alternativos.
La cifra de muertes aumentaba constantemente mientras los rescatistas retiraban cuidadosamente los escombros.
El jefe de policía de Putnam, Eddie Farris, dijo que sólo el 30% del área del desastre había sido inspeccionada hasta el mediodía. “Muchas de estas casas tenían sótanos y tenemos la esperanza de que todavía haya gente allí”, afirmó.