El coronavirus sigue siendo el tema del momento en todo el mundo y mientras las áreas más afectadas de Asia seguían luchando contra una epidemia viral que dejó cientos de nuevos casos en Corea del Sur y China, la preocupación sobre la infección y su contención se extendió por todo el planeta. Hasta ahora se han contabilizado 938 nuevos casos en China y Corea del Sur.
Por primera vez, el coronavirus dejó más contagios fuera de China, el epicentro del brote, que dentro del país. Con la primera confirmación de un caso en Brasil el miércoles, el primero en Latinoamérica, el nuevo virus ha llegado a todos los continentes salvo Antártida.
Estados Unidos, con 60 casos, no se libró del temor que sacude Asia, Europa y Oriente Medio. Su presidente, Donald Trump, declaró que el país estaba “muy preparado” para cualquier amenaza que suponga el virus y nombró al vicepresidente, Mike Pence, como supervisor de la respuesta al brote.
A medida que la epidemia se expande por todo el mundo, las preocupaciones por el COVID-19, la enfermedad generada por el virus, se multiplicaron.
“El aumento repentino de casos en Italia, la República Islámica de Irán y la República de Corea es sumamente preocupante”, dijo el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Aunque el virus llegó tanto a países ricos como pobres, su presencia en lugares con poca capacidad para detectarlo, responder a él y contenerlo planteó temores por su avance descontrolado allí y las facilidades para que llegue a otros puntos.
Las grandes aglomeraciones se han visto con cautela: las escuelas cerraron, las iglesias trasladaron sus servicios a internet, las empresas de reparto de comida despuntaron y se anularon eventos deportivos. Los Juegos Olímpicos comienzan el 24 de julio en Tokio, y el vocero del gobierno de Japón aclaró que los preparativos seguían a delante y la cita olímpica se celebraría según lo previsto.
Corea del Sur reportó 505 casos más el jueves para un total de 1.766. La mayoría de los contagios se concentran en la cuarta ciudad más grande del país, Daegu. El gobierno ha movilizado recursos de salud pública para asistir al rebasado sistema médico de la región.