Cientos de pasajeros comenzaron a desembarcar este miércoles del crucero Diamond Princess al concluir una controversial cuarentena de dos semanas que no pudo evitar la propagación de un nuevo virus entre pasajeros y tripulantes.
Las autoridades continúan realizando pruebas para detección del coronavirus que ha infectado a miles de personas en China y a por lo menos 540 a bordo de la embarcación.
Algunos pasajeros publicaron en Twitter que recibieron formularios en los que se les preguntaba si presentaban síntomas como jaquecas, fiebre o tos. Los pasajeros que arrojaron negativo a los análisis y no presentaban síntomas de la enfermedad COVID-19 aún debían tomarse la temperatura antes de que se les permitiera dejar la embarcación.
Un pasajero japonés dijo que aún esperaba los resultados de su análisis y que estaba preocupado.
Las autoridades japonesas pasarán los próximos días iniciando la riesgosa evacuación de unas 2.500 personas que han sido mantenidas a bordo de la embarcación anclada en el puerto de Yokohama, cerca de Tokio, después de que se le detectara la enfermedad a uno los pasajeros que bajó del barco en una parada previa en Hong Kong.