El gobierno británico dará autoridad a una agencia reguladora para multar a las empresas de medios sociales que tengan contenido dañino en sus plataformas.
Los planes del gobierno darían competencias a Ofcom la agencia reguladora británica de telecomunicaciones, para aplicar un “deber de diligencia” de compañías como Facebook y Twitter, que requeriría “proteger a los usuarios de contenido dañino e ilegal terrorista y de abusos a menores”.
Las empresas que permitan que ese material se propague o no lo retiren con suficiente rapidez podrían ser sancionadas. Ofcom supervisa ahora a las cadenas de radio y televisión y tiene poder para imponer multas o incluso expulsar de las emisiones a los infractores reincidentes.
El gobierno dijo estar “decidido” a introducir el cambio, pero hará falta una nueva legislación para que entre en vigor. Las autoridades trabajaban para preparar una nueva ley, señaló. Las nuevas normas serán “proporcionadas y fuertes”, indicó la secretaria digital británica, Nicky Morgan.