Las autoridades militares colombianas se declararon el lunes en máxima alerta debido al anuncio del grupo guerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN) de realizar un paro armado en todo el país entre el 14 y 17 de febrero. El ELN lo informó en un comunicado divulgado en Internet.
En los llamados “paros armados”, la guerrilla suele restringir el desplazamiento de vehículos por carreteras y la movilidad de las personas y amenaza con ataques a quienes transiten por las vías, incluyendo a caravanas escoltadas por el ejército. El último paro armado del ELN se realizó hace un año.
“El (ELN) debe actuar con responsabilidad y, por tanto, informamos con anterioridad para que la población permanezca en sus viviendas y sitios de trabajo como fincas, talleres u otro espacio laboral, pero que no tengan que ver con el transporte terrestre, fluvial y aéreo”, advirtió el ELN.
Agregó que el único tránsito que se permitirá será el de ambulancias con enfermos y familiares que tengan que sepultar a seres queridos.
Ante el anuncio, el ministro de la Defensa, Carlos Holmes Trujillo, señaló en rueda de prensa que las fuerzas militares están listas y en alerta máxima para prevenir y contrarrestar cualquier acción del ELN en los próximos días.
“Las fuerzas militares y la Policía Nacional van a responder con la firmeza adecuada y legítima y con todo rigor ante las amenazas de estos terroristas”, subrayó el ministro. “No vamos a permitir que estos criminales vengan a chantajear al gobierno con terrorismo y ataques a la población civil y a la infraestructura, alegando falsos deseos de paz”.
Trujillo refirió que al ELN lo conocen muy bien los colombianos y la comunidad internacional porque “llevan décadas engañando a la sociedad colombiana con falsas promesas de paz”, y recordó que “hace un año, el 17 de enero, al mismo tiempo que pedían negociaciones de paz, esa organización criminal asesinó de manera cobarde a 22 cadetes en la Escuela General Santander”.
Sergio Guzmán, director de Colombia Risk Analysis –una consultora privada de riesgo político en el país– dijo a la AP que “el ELN está haciendo lo más que puede para mostrarse un actor relevante. En ese sentido, el comunicado es para reafirmar su relevancia y poner en relieve que ellos aún mantienen un semblante de control territorial.”
Desde julio pasado, el ELN ha realizado varios atentados, especialmente contra militares y policías. Además de cometer secuestros, ha atacado decenas de veces la infraestructura de la petrolera estatal Ecopetrol en el último año, según las autoridades.
El ELN inició conversaciones de paz con el gobierno del expresidente Juan Manuel Santos en 2017 en Cuba, aunque ambas partes nunca pudieron acordar un alto el fuego.
Los diálogos con el presidente Iván Duque están congelados. El mandatario ha dicho en varias oportunidades que hasta que el ELN no libere a las personas que tiene secuestradas y deje de cometer ataques no volverán a dialogar.
El grupo nació en 1965 como un proyecto político inspirado en la revolución cubana y tiene en la actualidad unos 2.400 combatientes, dijo recientemente a The Associated Press el general Luis Navarro, comandante de las fuerzas militares.