En Venezuela se ha llevado adelante “una política ecocida” que se evidencia en la tala indiscriminada, derrames petroleros, minería ilegal, contaminación del aire y del agua, lo cual ha sido ha sido permanentemente denunciada por el Movimiento Ecológico, sin que se hayan aplicado las medidas para aplicar los correctivos.
Alejandro Aguilera, secretario general nacional de los verdes, aseveró que “Venezuela está al borde de una hecatombe ambiental” producida por las políticas emanadas del Estado venezolano.
El dirigente ecologista denunció que las autoridades carecen de consciencia ambiental y que sus acciones u omisiones han repercutido negativamente en contra de diversos ecosistemas de la república.
“El oro de sangre es una muestra de cómo desde el Gobierno venezolano se actúa sin ningún pudor, como se destroza reservas naturales invalorables no solo para Venezuela sino para el mundo”, afirma.
Afirmó que los diversos ecocidios cometidos en el país no son problemas de los venezolanos sino de todo el mundo, porque la “muerte del pulmón vegetal de la humanidad, es el fin de la vida misma en todo el globo”.
Ratifica su posición de continuar denunciando, visualizando y mostrando ante los ojos de las naciones del globo terráqueo, los diversos delitos ambientales que el Estado venezolano está cometiendo en contra del mundo entero.
“Cuando se secan ríos, cuando se tumban árboles, cuando contaminamos el aire matamos al planeta y con él a toda la humanidad”, aseguró.
Global Green
Alejandro Aguilera indicó que en la Global Green, ente que aglutina a todos los partidos y movimientos verdes del mundo, reposan parte de las denuncias de ecocidios y demás delitos ambientales cometidos por el Gobierno de Venezuela en los últimos 10 años.
“Nosotros tenemos un compromiso con la vida y la defenderemos sobre todo y con todo. Entre los ecológicos de Venezuela existe una voluntad de lucha que nadie nos la quitará ni hoy ni nunca”, afirmó el ambientalista.