Los campos petroleros de Morichal, Punceres y Punta de Mata se encuentran tan abandonados que parecen fantasmas, ya que sus habitantes, trabajadores petroleros, se fueron.
Las causas han sido la persecución, los accidentes laborales y los bajos salarios, dice la diputada María Graciela Hernández, de la Asamblea Nacional, al ser consultada por Elimpulso.com.
La responsabilidad es de Pdvsa ya que al dejar de operar por haber perdido el capital humano, otorgó contratos a empresas extranjeras, las cuales subcontrataron; pero, no cumplió con sus obligaciones
Hoy dia Morichal está invadido por familias de diversas regiones, porque los trabajadores que ocupaban las viviendas de Pdvsa, se fueron. Así ha ocurrido también en Punceres y Punta de Mata, para citar algunos de los lugares más emblemáticos de la actividad petrolera.
Cabe resaltar que lo más común son los accidentes de tipo ambiental, dijo la diputada Hernández, quien ha venido trabajando en esa área y denunciando casos muy graves, que han perjudicado a los habitantes de Monagas.
La industria petrolera es altamente contaminante del ambiente, expone. Unido a esta circunstancia está la falta de mantenimiento, supervisión y personal adecuado para prevenir o sanear los lugares afectados por el sistema de transporte.
Al respecto señala que las tuberías externas, que transporte aceite utilizado como diluyente del crudo o de las estaciones que salen ya procesado el petróleo, como no tienen suficiente mantenimiento se deterioran y les aparecen ranuras, por donde se producen los derrames que se extienden por las sabanas y los cuerpos de agua.
Generalmente, ocurren incendios.
Otro hecho significativo es que cuando se dañan las válvulas son sustituidas por otras que no se corresponden a la necesidad y explotan, lo que también origina derrames y accidentes. Uno de los últimos ocurrió hace dos semanas en Punta de Mata, donde se pudo apreciar, durante muchísimas horas, como los chorros de crudo se proyectaban hacia el cielo.
Llama la atención que Monagas es uno de los estados donde se puede obtener petróleo liviano, pero, por supuesto, se requiere de grandes inversiones que no está en capacidad de hacerlas Pdvsa.
Es por esta causa que las empresas americanas, francesas y de otras nacionalidades que fueron a esa entidad dejaron de operar porque Pdvsa no les pagaba.
Y así ha pasado, desde hace dos años, con los seguros que protegían a los trabajadores y sus familiares. Ahora, los pocos que quedan trabajando, carecen de asistencia médica y hospitalaria, porque ya no pueden tener acceso a las clínicas.
La industria petrolera era, fundamentalmente, la que movía la economía de Monagas, estado que subsiste por la actividad agropecuaria que se mantiene mediante el esfuerzo de los pocos que se atreven a arriesgarse a producir, enfatizó la diputada Hernández.