Seguimos con la esperanza de que todos en el país tengamos una muy buena mejoría, sí es que hubiese interés de lo que toman decisiones de ocuparse de eso y no dudar de la angustia que cada día se agudiza más y no se ve ninguna intensión de corregir esta anomalía,que nos lleva a todos al fondo del abismo, sin importar un comino hacia donde vamos, con una insensibilidad, como si fuésemos todos enemigos, donde a nadie le importa la destrucción de la patria, por lo que se escucha y se ve que no hay ningún interés en oír, escuchar a nadie, ni consultar otras opiniones para ver a donde está la falla, no,eso para ellos es pecaminoso, por creer que se lo saben todo y se lo están comiendo, sin darse cuenta el hundimiento y desastres causados, tratando de corregir, pero haciendo lo mismo o quizás peor, roguemos por la humildad y que se consulte a quien pueda a portar buenas ideas, obviando el desastre y sin retaliaciones en busca del bien, tomando en cuenta el proverbio chino que reza así “ si decides vengarte, es mejor que caves dos tumbas”, por ellos un llamado a la unión, dejar la pelea a cuchillo, consciente que el país es de todos y debemos estar muy unidos por su pronta recuperación, en todos los sentidos y hacerle saber a todos que ninguna patria puede sobrevivir a una permanente confrontación, es de ser una patria amistosa, próspera, y con vida e ideas propias.
Lo que todos debemos preguntarnos qué pasa o paso en nuestra patria, a donde fueron o que se hicieron tanta riqueza que era la mayor de Latinoamérica y proporcionalmente del mundo, a donde se fue eso y nuestra idiosincrasia por nuestra gente, dicen que seis millones se han ido, si hasta hace un poco menos de dos décadas éramos receptores de muy buena parte del mundo y buenos anfitriones, me costa que todos admiraban a Venezuela y la consideraban un paraíso, donde se sentían mejor que en su casa y respetados y a los pocos días familiarizados y apegados a nuestras costumbre y admirando nuestras buenas famas de excelentes anfitriones, como caso único, esta nueva Venezuela ha sido una sorpresa, nos lleva a decir lo que aparece sin anunciarse,tan poco es bien acogido.
Bueno, ya hemos advertido lo que más nos agobia y en nombre de todos, los que no han perdidos la voluntad de hacedores, le ratificamos el deseo espontaneo de seguir haciendo, produciendo y participando en el desarrollo, con una buena alianza y respeto a los espacios; esto lo decimos como dolientes y a petición del sector privado y productivo que está dispuesto a ofertar hasta el sacrificio por ver a nuestro país enrumbado a la prosperidad, a la paz, al amor, al progreso y a la unión; esto es la aspiración, de los organismo que solo piensan en producir sin trabas, como lo es Fedenaga, Fedeagro, Fedecamara, Cámara de la Construcción, Transporte, Cámara de Industriales, Cámara de pequeños Industriales (Camil), Turismo, Comercio, no piden, ofrecen producir más con menos obstáculos, a pesar de una inflación acumulada del año 2019 de 7344.4% léase bien, siete mil trescientos cuarenta y cuatro punto cuatro por ciento; aun consciente de esto el sector productivo da un paso al frente consiente de que no hay ninguna empresa decente que pueda alcanzar estas anomalías, por ellos debemos seguir buscando las alianzas e ideas que puedan contribuir a la solvencia moral y económica por medio del trabajo honesto y productivo.
Ahora más que nunca el campo es la solución, unidos todos por la paz, la convivencia, el respeto y la prosperidad de nuestro país.
José Gerardo Mendoza Durán