Mientras Nicolás Maduro le confiere todo el poder de la administración pública al embajador cubano Dagoberto Rodríguez Barrera y de hecho la soberanía del país, el presidente de la Asamblea Nacional y encargado del Ejecutivo Nacional, Juan Guaidó, es invitado al Foro Económico Mundial, donde no sólo expuso la crisis por la cual está atravesando Venezuela, sino que ha pedido apoyo para recuperar la democracia en su territorio.
Al hacer esa afirmación al ser entrevistado por Elimpulso.com, el Dr. Julio César Moreno, exembajador de Venezuela en Chile, indicó que la presencia de Guaidó en Suiza, es el reconocimiento a su condición de presidente para la transición, una vez que haya cesado la usurpación y al esfuerzo por la libertad de un país sumido en el mayor desastre sufrido por un pueblo que no tiene guerra.
Coincide la gira de Guaidó con la decisión que acaba de tomar el régimen al incorporar a Dagoberto Rodríguez Barrera al Consejo de ministros y darle la asesoría del Comando Estratégico Operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, así como también de gobernaciones, institutos y demás organismos oficiales, los cuales están obligados, como dijo el propio Maduro, de abrirle las puertas.
Este es un hecho sumamente grave que se registra por primera vez en el mundo moderno cuando voluntariamente y no por conquista militar, un mandatario entrega la soberanía de su país, lo que constituye la disolución de la república.
La Constitución nacional establece que Venezuela es un país irreversiblemente soberano e independiente, pero con lo dispuesto por Maduro,ya no lo es. Ha cometido el delito de traición de la patria al poner el destino de nuestro país en manos de una potencia extranjera.
Lo que se está planteando es una lucha entre la democracia y la dictadura, entre la libertad y la tiranía.
Además de este bochornoso hecho
Maduro se ha convertido en el jefe del cuartel general de la subversión contra los países democráticos del continente. Chile, por ejemplo, ha sido objeto de una violencia con características que no se veían antes: no solo se ataca al gobierno, sino que también se arremete contra las iglesias, se queman cuarteles y se causa destrucción planificada desde Miraflores.
Es por eso que Davos, en el momento en que se convierte en el foco del mundo por los temas que se tratan para buscar el bienestar de los países, está reflejando lo que pasa en Venezuela y dándole un reconocimiento a Guaidó como líder emergente.
En ese foro también se está conociendo la realidad de la violación de los Derechos Humanos a los venezolanos, contenida en el informe de la alta comisionada de las Naciones Unidas, Michelle Bachelet.
Y también se está denunciando el saqueo de las riquezas mineras del territorio venezolano por parte del régimen y las mafias, así como de la operatividad de grupos terroristas. De modo, pues, que Guaidó en su gira ha tenido el reconocimiento a su legitimidad y apoyo de la comunidad internacional para que podamos seguir luchando por el restablecimiento de la democracia, que nos permitirá recuperar el país.