Marcos Pérez Jiménez se vio forzado a huir a Santo Domingo, República Dominicana, el 23 de enero de 1958 -hace hoy 62 años- porque ya el pueblo no soportaba su dictadura y así lo comprendieron los militares que decidieron pedirle al dictador que abandonara el poder.
Existía para entonces una oposición liderada por la Junta Patriótica, de la cual formaban parte Acción Democrática, Copei, Unión Republicana Democrática y el Partido Comunista.
Sin embargo, sus principales líderes Rómulo Betancourt, Rafael Caldera, Jóvito Villalba y Gustavo Machado se encontraban exiliados.
Esa Junta Patriótica, dirigida por el periodista Fabricio Ojeda, reportero de El Nacional y destacado precisamente en Miraflores, comenzó su lucha el 14 de junio de 1957 planteando, en un documento,respeto a la Constitución, enfrentar la reelección presidencial de Pérez Jiménez y elecciones libres. Distribuyó hojas volantes en el desfile militar de la Semana de la Patria, el 20 de ese mismo mes, y continuó a través de hojas exteriorizando el rechazo a la dictadura.
El primero de enero, cuando se celebraba animadamente la llegada del año nuevo, la fuerza aérea se alzó contra el régimen, tanto en Maracay como en Caracas. El movimiento fue encabezado por Hugo Trejo, quien venía organizando el golpe de Estado desde el 16 de julio del 57 y había logrado compactar a los militares que para entonces también pensaban de igual forma que él. Al fracasar el intento de ese primero de enero, los comprometidos se refugiaron en Colombia.
El 21 de enero arreció la presión contra la dictadura cuando se registró una huelga general, que incluyó la prensa, ya que dejaron de circular los periódicos, que en ese entonces utilizaban plomo en sus impresoras. Tal era el impacto que tenía la prensa en ese entonces que llegó a ser considerado el cuarto poder. Los militares, en especial la marina y la fuerza aérea, así como la guardia nacional, se pusieron al lado del pueblo y decidieron firmemente pedirle la renuncia al dictador, que se sustentaba en el Ejército y el cuerpo represivo de la Seguridad Nacional.
El 23 de enero a la una de la madrugada, en la Escuela Militar, se constituyó la Junta de Gobierno presidida por el contralmirante Wolfgang Larrazábal Ugueto y conformada por varios oficiales.
En el avión presidencial, que le decían la vaca sagrada, huyeron Pérez Jiménez, su familia, algunos ministros y amigos del dictador.
A las 2 de la madrugada la población enterada de que ya había un nuevo gobierno se echó a las calles de Caracas. Fue asaltado el edificio de la Seguridad Nacional, liberados los presos políticos y linchados muchos de los funcionarios que habían torturado a los detenidos y hasta causado la muerte de dirigentes políticos.
En el curso del día fueron destituidos dos de los miembros de la Junta de Gobierno, a petición de la gente que los consideraba muy afines a la dictadura, y llamados a formar parte del gobierno dos civiles: Eugenio Mendoza y Blas Lamberti. Ese día, que posteriormente fue declarado día de la democracia, dio paso a un período de 40 años de gobiernos alternativos entre AD y Copei, que cesó cuando Hugo Chávez asumió el poder y declaró que entrábamos a la quinta república y,posteriormente, al socialismo con vestimenta roja, rojita.
Esta nota fue elaborada con base al archivo de El Impulso.
