Los funcionarios policiales en el estado Lara han tenido que buscar otras manera de sobrevivir en un país golpeado severamente por la hiperinflación desde agosto de 2018, cuando Nicolás Maduro decidió realizar la reconversión monetaria.
A pesar que desde el 1 de enero de 2020 se incrementó nuevamente el salario integral, ahora fijado en 450.000 mil bolívares, los uniformados en la entidad han tenido que recurrir a otras opciones de ingreso para «sacar algo más» que les permita llevar comida a su familia.
Un funcionario de seguridad, quien pidió no ser mencionado por temor a represalia, informó para Elimpulso.com que mucho policías trabajan de guardaespaldas y vigilantes de negocios o establecimientos comerciales para obtener un dinero extra, utilizando la dotación otorgada por el Estado.
«Muchos de nosotros trabajamos custodiando algunos negocios en la centro de Barquisimeto. Allí nos pagan mucho más de los que nos da el gobierno. Realizamos nuestro labor como policía y después nos vamos a trabajar como vigilante o guardaespaldas«, indicó el policía, quien además señaló que algunos de sus superiores estan al tanto de este trabajo «extra» y solo les piden que cuiden el arma de reglamento y las motocicletas.
En cuanto al salario que devengan, el policía indicó que no les alcanza para nada y puntualizó que la quincena solo le sirve para comprar queso y un cartón de huevos.
«Cobramos 250 quincenal y eso no alcanza para nada. Solo para un cartón de huevo y queso. En los negocios como vigilantes o escolta de cualquier persona importante el pago pasa de los 150 dólares mensuales«, precisó el funcionario policial, padre de dos niños, con 13 años de servicios.
Es importante mencionar, que los funcionarios policiales en Venezuela han perdido credibilidad ante la población debido a diversas actividades ilícitas como el cobro de dinero en alcabalas para que el usuario evite ser sancionado; muchas veces casos inventados por los efectivos de seguridad.