Los equipos que combaten los incendios forestales de Australia han podido pasar de la defensa a la ofensiva por primera vez en semanas gracias al clima más templado, dijeron bomberos.
Dale McLean, integrante del equipo cerca de la localidad de Bodalla en el estado de Nueva Gales del Sur, estaba entre los que despejaban arbustos y maleza frente a las llamas, para tratar de evitar que lleguen a la carretera principal.
“Este incendio tuvo un gran auge hace unos siete u ocho días, y con el clima cambiando ahora, más templado, el incendio se ha calmado”, comentó. “La conducta del incendio ha cambiado. Así que podemos colocarnos frente a él ahora, ponernos a la ofensiva”.
Australia enfrenta incendios forestales cada año, pero puede que esta temporada sea la más devastadora que el país haya visto jamás. Al menos 25 personas han perdido la vida, entre ellas varios bomberos voluntarios, miles de casas han sido engullidas por las llamas, millones de hectáreas han quedado calcinadas y se estima que cerca de 500 millones de animales han perdido la vida, según Chris Dickman, investigador de la Universidad de Sídney.