Con una merma en las ventas que ronda entre el 50 % y el 70 % además de trabajar con servicios básicos deficientes y pagando una cuota de arrendamiento por las nubes, los locatarios del Mercado Mayorista de Barquisimeto califican este 2019 como el peor en la historia de éste, el que otrora fue referencia de la economía en Venezuela.
Los dueños de galpones dentro del referido lugar contaron a Elimpulso.com cómo han pasado este año; sin embargo pidieron resguardar su identidad, debido a que existe una pugna legal entre la directiva de Mercabar y un considerable número de locatarios y, a raíz de ello, han sido víctimas de amedrentamiento y represalias.
Hace un mes culminó la odisea que vivían los inquilinos de los 288 galpones que conforman Mercabar, al estar sin servicio eléctrico debido a la explosión de un transformador en las cercanías del mercado. Esa situación generó, entre otras molestias, falta de conectividad en internet y telefonía, lo que a su vez, trajo bajas súbitas en las ventas que ya venían siendo pocas, debido a que los puntos de venta no funcionaban por la falta de internet.
Al menos cuatro meses consecutivos estuvieron trabajando sin electricidad y, en su mayoría, hasta las 2 o 3 p.m. A eso se le suma que el suministro de agua por tubería sólo llega una vez a la semana y las malas condiciones en las que están las calles que deben recorrer trabajadores y usuarios para entrar y salir del lugar.
Canon de arrendamiento por las nubes
Los locatarios denunciaron que desde el primero de diciembre la tarifa por concepto de arrendamiento aumentó a 12 millones de bolívares por mes (alrededor de 250 dólares). Antes de ese aumento, estaba sobre los 7 millones de bolívares. Consideran que es un costo muy alto que no se corresponde con la calidad de los servicios en el recinto, los cuales, aseguran, son responsabilidad directa de la junta directiva de Mercabar, a la cual demandaron por esa y otras razones relacionadas con la mala gerencia en el mercado.
“No hay contraloría, ni auditoría, ni presupuesto de obra. No han presentado el cierre del ejercicio 2018 ¿Qué están haciendo con el dinero?”, se pregunta un comerciante, quien solicitó permanecer en el anonimato, y además afirmó que Mercabar dejó de cumplir con su función social, debido a que los dueños de bodegas y pequeños comercios dejaron de ir, por el mal servicio que se presta para acceder al recinto.
Una de las “trabas” es el cobro de peaje para ingresar, el cual se debe pagar mediante un depósito en efectivo dentro de los bancos que están en Mercabar y posteriormente presentarlo para poder salir.
Vías en deplorable estado
Tanto para entrar, como para salir de Mercabar, los conductores deben sortear numerosos huecos de gran dimensión. En la avenida Carlos Giffoni hay un brote de aguas negras desde hace 15 días, el cual ya habían reparado los entes con competencia; sin embargo éste se volvió a abrir.
Por otra parte, al salir del Mercado Mayorista se deben recorrer al menos dos cuadras en una calle repleta de huecos de más de cinco centímetros de profundidad.
Inseguridad reinante
Los episodios de robos de mercancía y arrebatones de celulares, siguen viéndose en Mercabar, sobre todo en el área de la Playa, donde además pulula la indigencia y las personas buscando comida en los contenedores de basura.
Malas expectativas para 2018
Ante este escenario, los comerciantes no tienen expectativas favorables para el 2020, mientras la economía siga decreciendo e instalándose más en función del dólar. “Aquí la ganancia es para mantenerse. Ya no es como antes”, dijo un locatario.