Las fallas recurrentes en los servicios eléctrico, de suministro de agua y de combustible en las distintas regiones del país, agudizan las dificultades para la prestación de una atención médica eficiente en los distintos centros de salud, señaló este jueves el presidente de la Federación Venezolana de Médicos, Douglas León Natera.
Señaló que desde hace por lo menos ocho años han venido denunciando la crisis en el sector de la salud, y en este momento entre un 90 y 95% de los hospitales del país están en lok out, o cierre técnico.
Destacó que con los salarios tan bajos que perciben los médicos y con las “utilidades por el piso” es muy poco probable que se puedan comer las hallacas en los hogares de los médicos.
Explicó que sin combustible es imposible que los médicos vayan a los hospitales a cumplir con sus actividades, las colas para poner gasolina, por lo menos en el Zulia son de dos y tres días para poder colocar unos 40 litros de gasolina, lo que resulta inaudito en un país petrolero.
En materia salarial indicó que en promedio un médico residente percibe Bs. 200 mil más cesta tiket; especialistas, adjunto II escalafón máximo 12, apenas están en 410.000 o 415.000 bolívares ocho horas, después de 30 años de trabajo en un hospital, señalando que esto es absurdo, en este país con una inflación inmensa, y ahora en diciembre, con las utilidades en el piso es imposible que se puedan comer hallacas en las casas de los médicos, señaló.