Se oficializó la victoria de Evo Morales en las elecciones presidenciales de Bolivia, sin llegar a medirse con el canidato opositor, Carlos Mesa en una segunda vuelta; y en medio de fuertes denuncias de fraude.
Este es el veredicto del cuestionado escrutinio del Tribunal Supremo Electoral (TSE), que le atribuyó la tarde de este jueves una victoria a Morales con una ventaja de al menos un 10,55%. El actual presidente evita un desempate por apenas cinco décimas, según reseña El País.
El proceso electoral, rodeado de denuncias de fraude, desencadenó una oleada de protestas opositoras en las principales ciudades del país. Mesa no reconoce el resultado y varias instancias internacionales, encabezadas por la OEA, la Unión Europea y Washington, han manifestado su profunda preocupación por lo sucedido en los últimos días. Todas ellas respaldan la celebración de una nueva votación que decida el resultado en segunda vuelta.
El cómputo oficial del TSE, indicaba que Morales alcanzó 47,07% de los votos, mientras que el candidato Carlos Mesa, consiguió 36,51%.
«Ganamos con más del 10%, es constitucional», dijo el mandatario en la televisión estatal Bolivia TV.
Mientras tanto, Mesa dijo que el Movimiento al Socialismo (MAS) de Morales acababa de «consumar el fraude«, y llamó a los bolivianos a mantener una lucha pacífica.
Con información de El País.