Caracas fue la primera ciudad de Venezuela en tener Cronista Oficial, siendo el primero Enrique Bernardo Núñez designado en 1945 y renunció en 1950 siendo sustituido por Mario Briceño Iragorry y de nuevo se encargó hasta su muerte en 1964.
Barquisimeto designó su primer Cronista Oficial en mayo de 1950 víspera de su Cuatricentenario y el Concejo Municipal escogió a Eligio Macías Mujica, “brillante periodista y maestro difusor de muchos aspectos de la historia local, redactor y director de “El Impulso” donde mantuvo amenas columnas de contenido variado en los cuales entregaba, en buena prosa poética, interesantes páginas de información histórica y realidades del pasado para reflexiones del presente”, escribió el posterior cronista Ramón Querales en sus apuntes para la historia del municipio Iribarren, editado por esa municipalidad en 1995, cuando la ciudad lo tuvo como último Cronista Oficial, porque el de ahora nadie sabe quién es y donde mora. El cargo era ad honorem y a Macías Mujica le aprobaron 300 bolívares para gastos de representación.
En abril de 1951 renunció y el Concejo Municipal designó segundo Cronista Oficial a Antonio Álamo quien falleció en Caracas en marzo de 1953 y Macías Mujica de nuevo volvió, designación acogida con aplausos.
Hijo de Pedro Macías Guevara y Palmacia Mujica Campíns, el futuro gran cronista de la ciudad nació en Barquisimeto el 4 de marzo de 1900 y desde muy corta edad, denotó inclinaciones por las letras y la historia, convirtiéndose en un gran periodista, ensayista y cronista del Barquisimeto de antaño. Su vocación por la profesión lo impulsó a colaborar en los diarios “Eco Industrial”, “El Heraldo” y el semanario “Notas”.
Fue “El Impulso” el que le dio la oportunidad de prolongar su vida y práctica por la vida intelectual y desarrollar su amplia labor periodística e intelectual en la sección que firmaba con el seudónimo “Juan de Segovia”, luego desde 1930 hasta 1943 como redactor y más tarde director. Fue un hombre modesto, dotado de una memoria extraordinaria, que le permitía referir los acontecimientos y las citas más remotas de las crónicas larenses.
Su constante lucha por proteger y preservar su tierra, personajes folklóricos e intereses de la ciudad, lo llevó a fundar, junto a otros intelectuales el Centro de Historia Larense, que da cabida a todo aquel material de consulta sobre la ciudad, el estado y la nación e incluso, un recinto, donde las generaciones futuras continuasen con la labor de rescatar los papeles de la historia larense.
Hermann Garmendia, cuarto Cronista Oficial de Barquisimeto escribió que “Macías Mujica –como Leoncio Martínez– siempre se inspiraba en lo popular y los problemas –del hombre humilde del borroso hombre de la calle –los hacía suyos en nombre de una mejor distribución de la justicia. Era el periodista completo en el sentido de la multiplicidad: desde redactar una nota local hasta la elaboración del grave editorial, pasando por el estudio histórico y la alusión pintoresca del pretérito en la crónica antañona”, según refirió el quinto Cronista Oficial de Barquisimeto Ramón Querales.
En la nota luctuosa a raíz de su muerte en julio de 1992, “El Impulso” le llamó con justicia y poesía, “Albacea del pasado urbano”, cronista que delineó en su prosa muchas historias lindas de la ciudad que ya no existe.
Juan José Peralta