Carlos Scull, embajador de Venezuela en Perú, designado por el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, aseveró que es una vergüenza que hayan venezolanos dejando una mala imagen del país en Perú.
Señaló que hay una gran cantidad de venezolanos que salieron de Venezuela para intentar conseguir un mejor futuro, el cual no podían tener bajo el régimen chavista, pero que existen otras personas que aprovecharon la migración para cometer actos vandálicos en otros países.
“Nos avergüenza que un pequeño grupo de delincuentes venezolanos empañen a quienes migraron para emprender y salir de la dictadura. En Perú hay 369 presos venezolanos”, comentó.
Con respecto a la manera de trabajo de la embajada en Perú, comentó: “La embajada no recibe recursos internacionales directamente. Se desembolsa a través de agencias de cooperación y se distribuye a través de diversas ONGs”.