Fuentes de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) aseguraron este martes que Venezuela desde hace seis meses es uno de los 41 países que necesitan ayuda alimentaria exterior en medio de la hiperinflación y la falta de insumos para la producción de cereales.
La FAO detalló en su informe que la hiperinflación que atraviesa el país «ha restado gravemente poder adquisitivo a los hogares, lo que ha limitado el acceso a los alimentos«.
Puntualizan que ante la depreciación del bolívar, «la capacidad reducida de importar ha llevado a un escaso suministro de alimentos en los mercados domésticos y una mayor presión sobre sus precios, afectando severamente la seguridad alimentaria de grandes segmentos de la población».
Resaltó que más de 4 millones de personas han abandonado Venezuela y tienen “significativas” necesidades humanas en los países vecinos donde se han establecido.