Al menos seis deportistas han sido víctimas del hampa desmedida que existe en Venezuela entre el 2018 y 2019. La Universidad Católica Andrés Bello, en abril de este año, durante la presentación del Plan País en materia de seguridad, aseguró que Venezuela registra más de 330.000 muertes violentas en 20 años de régimen chavista.
Uno de los casos que ha conmovido la opinión pública ha sido el asesinato de Brayan Navarro, de 10 años, quien fue asesinado por una banda delictiva mientras se desplazaba con sus padres por la carretera nacional El Tigre- Puerto Ordaz. El infante era jugador de fútbol del equipo infantil de Mineros de Guayana.
Otro jugador que fue víctima de la delincuencia Gerardo “el Gato” Mendoza, quien fue asesinado en un presunto intento de robo. “El Gato” Mendoza militó en Trujillanos FC y el Portuguesa FC.
Douglas Chiquito, de 33 años, murió al volcar su vehículo luego de ser acribillado el pasado 14 de marzo. El basquetbolista jugó con los quintetos Bucaneros de La Guaira, Marinos de Anzoátegui, Gigantes de Guayana y Gaiteros del Zulia.
Los peloteros de los Cardenales de Lara, Luis Valbuena y José Castillo, murieron instantáneamente al salir disparados del vehículo, tras esquivar contundentes piedras atravesadas por bandas delictivas en la autopista que comunica los estados Yaracuy y Lara.
En febrero del 2018, el expelotero Ronald Jiménez fue abatido por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) en la avenida Páez, en Caracas. Según reseñaron los medios nacionales, el exlanzador de los Leones del Caracas y de los Mellizos de Minnesota, supuestamente delinquía en ventas de apartamentos en la capital.
