El total abandono a las comunidades nativas de Venezuela, el cual las ha llevado a padecer aún más por la terrible emergencia humanitaria en el país, rechazó este viernes el diputado a la Asamblea Nacional, Romel Guzamana, en el marco del Día Internacional de los Pueblos Indígenas.
“Esta crisis que vivimos nos ha llevado a la supervivencia porque el comunismo ha venido matando a los venezolanos. La gente no sabe lo que es vivir en una frontera cuando hay crisis, corrupción, falta de alimentos, y medicinas y deterioro en los hospitales”, afirmó.
Denunció que las comunidades indígenas se han visto sometidas e incluso desplazadas por paramilitares y funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB). “No podemos navegar en el río Orinoco o ir a los municipios porque están abandonados. La crisis impera en los estados Amazonas y Bolívar con el saqueo del oro por parte de las mafias de la dictadura”.
Guzamana recordó la masacre de los 25 pemones en el marco de la entrada de la ayuda humanitaria y afirmó que al régimen de Nicolás Maduro no le duele ni le interesan las comunidades indígenas de Venezuela.
“Queremos vivir, no morir. Todos los municipios fronterizos están abandonados y los grupos terroristas del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) permanecen en nuestro territorio”, señaló el parlamentario.
Informó que desde la Asamblea Nacional se harán las gestiones necesarias para obtener el respaldo de Brasil y Colombia. Además, ratificó el apoyo de las 35 comunidades indígenas al presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó.
“Queremos que los estados con altas riquezas sean de alta potencialidad y que los ciudadanos podamos avanzar hacia la prosperidad. Los pueblos indígenas se mantienen de pie hasta lograr el cese de la usurpación, el gobierno de transición y las elecciones libres”, ratificó.
Por su parte, el también diputado a la Asamblea Nacional y presidente del Parlamento Amazónico capítulo Venezuela, Ramón Flores, rechazó enérgicamente los crímenes de lesa humanidad que ha cometido la dictadura contra los pueblos ancestrales del país.
“Condenamos además la explotación de las riquezas a través del cianuro y del mercurio que matan nuestra flora y nuestra fauna. Los 35 pueblos indígenas cuentan con el respaldo del Parlamento Amazónico, la Asamblea Nacional y del Presidente legítimo de Venezuela”, indicó.