«Ray Kroc escribió que los hermanos McDonald habían creado «… un tipo de operación radicalmente diferente, un restaurante reducido al mínimo en servicio y menú, el prototipo por legiones de unidades de comida rápida que luego se extendería por todas partes … Por supuesto, la simplicidad de los procedimientos permitió a los McDonalds concentrarse sobre la calidad en cada etapa y ese fue el truco. Cuando yo lo vi funcionar ese día de 1954, me sentí maravillado. Su primer lema para McDonald fue «KISS, que significa, Keep it simple, stupid» Mantengan eso simple, «estupidos” Ray Kroc.
La segunda estrategia a la que hacen referencia Koch y Lockwood y que es muy diferente a la anterior pero igual de efectiva la llamaron, Propuesta- SImplificada. Esto implica crear un producto que sea útil, atractivo y muy fácil de usar, como es el iPad ( o cualquier otro dispositivo de Apple de la última década, la moto Vespa, el buscador de Google o la aplicación de los taxis Uber ).
Los productos elaborados con esta estrategia, generalmente poseen una estética agradable.
Esta estrategia crea un mercado grande que no existía previamente en la misma forma o en absoluto.
Por ejemplo, no existía un mercado para computadoras tipo tablet antes de iPad. Diferente a la estrategia de simplificación de precios, esta segunda estrategia no involucra una reducción radical de precios; ellos incluso pudieran comandar un mercado premium.
Sin embargo, está segunda estrategia también multiplica valor por dinero y por lo tanto el tamaño del mercado, gracias por hacer el producto o servicio más fácil de usar al igual que más práctico y/o más hermoso.
Esta estrategia trabaja cuando el producto se convierten en una alegría para usarlo.
Walter Isaacson el biógrafo de Steve Jobs escribió, que el “ hacia dispositivos simples, eliminando botones, software simples eliminando características e interfaces simplemente eliminando opciones. El atribuía su amor por la simplicidad por su entrenamiento en Zen”
Jony Ive creador de cada dispositivo de Apple desde el iPod en adelante, constantemente ponía atención a cualquiera que escuchara que su enfoque es hacer productos que fueran increíblemente simples de usar, aunque el proceso de diseño en sí mismo es extremadamente dificultoso. El enfatiza que es muy duro hacer algo muy simple. Su tarea decía, es “ resolver problemas increíblemente complejos y hacer que su solución aparezca inevitable e increíblemente simple, para que no se tenga idea de lo difícil que era eso.
En este sentido Lockwood y Koch encuentran extraordinario que, por lo que pueden decir, nadie se ha dado cuenta previamente que simplificar es la clave de aquellos productos o negocios innovadores que crean un valor alto para clientes, la sociedad y accionistas por iguales.
Definitivamente, simplificar ha sido un invisible hilo rojo corriendo a través de la historia de los negocios en nuestra vida, en la de nuestros padres y abuelos.
Italo Olivo
www.iolivo.com