Thalia Olvino, una estudiante de mercadeo de 19 años y 1,78 metros de altura que representó al estado Delta Amacuro, fue coronada Miss Venezuela 2019.
El modesto certamen, realizado el jueves por la noche en un estudio de televisión en Caracas, estuvo muy alejado de los fastuosos espectáculos de décadas pasadas. Y, por primera vez en la historia, no se mencionó las medidas de las concursantes en un intento por alejarse de los estereotipos.
Isabella Rodríguez entregó la corona a Olvino a ocho meses de haberse impuesto como la soberana de la belleza en uno de los reinados más cortos del Miss Venezuela. Sin embargo Rodríguez, una espigada morena de 25 años, representará al país en la 69na edición del Miss Mundo, que se realizará el 14 de diciembre en Londres.
Rodríguez fue electa a finales del año pasado en una edición inédita debido a que, por primera vez en casi cuatro décadas, la ganadora del concurso no representará oficialmente a la nación suramericana en la competencia de Miss Universo.
Otro hito de este año en el Miss Venezuela es que no se mencionaron las medidas de cintura, cadera y busto de las concursantes como acostumbró a lo largo de casi siete décadas, una decisión que los organizadores atribuyeron a un intento por alejarse de la «mujer estereotipada».
El espectáculo de tres horas se realizó en uno de los estudios de Venevisión, que desde hace varios años se ha convertido en la sede del evento luego que el país entrara en una compleja crisis económica, dominada por una hiperinflación de seis dígitos y una fuerte recesión, de la cual no escapó el certamen.
Anteriormente la elección de la Miss Venezuela se hacía en un gran estadio de la capital con un fastuoso espectáculo que se extendía por más de cuatro horas.
En esta edición el Miss Venezuela, que ha logrado siete coronas de Miss Universo y seis de Miss Mundo, aspiraba dejar atrás el escándalo que se desató el año pasado y que involucró a varias exconcursantes, acusadas en redes sociales de recibir beneficios a cambio de relaciones con figuras del gobierno.
A la crisis se sumó la salida de Osmel Sousa, el llamado «Zar de la Belleza» venezolana, de la dirección de la Organización Miss Venezuela que manejó por cuatro décadas.
La dirección de la organización fue entregada en el 2018 a las exreinas de belleza María Gabriela Isler, Miss Universo 2013; Jacqueline Aguilera, Miss Mundo 1995, y Nina Sicilia, Miss Internacional 1985, quienes debieron asumir la reestructuración del certamen y limpiar su imagen.