En profesor estadounidense de Arquitectura, Ronald Rael ha colocado unos subibajas en la valla que separa Estados Unidos y México. Ha sido exactamente en una zona de la Ciudad de Juárez. En las imágenes se puede ver tanto a niños como a mayores disfrutando de esta iniciativa reivindicatoria.
En el vídeo se puede ver cómo unos balancines unen, por unos segundos, a las personas que han sido separadas por barrotes de sus allegados.
«El muro se convirtió en un punto de apoyo literal para las relaciones entre EEUU y México, y los niños y adultos se conectaron de manera significativa en ambos lados con el reconocimiento de que las acciones que tienen lugar en un lado tienen una consecuencia directa en el otro lado», explica Ronald Rael en la entrada de Instagram donde ha publicado fotografías del proyecto.
Los balancines se han insertado con el fin de que los niños jueguen y se olviden por unos minutos de la amarga realidad que viven al otro lado del muro, muchos separados de sus familias.
El deseo que Donald Trump quiere que se haga realidad con este muro es reducir la inmigración ilegal. Cada paso que da, el presidente de Estados Unidos lo celebra. ¿El último? la autorización del Tribunal Supremo estadounidense para que Trump destine dinero público del pentágono para construir lo que queda del muro que tantas familias y amigos está separando.
La que fue su promesa en las elecciones de 2016 está tomando forma poco a poco al poder destinar dinero que, en principio, son para otros fines. Aunque el Congreso de EEUU se niega a aceptar el muro y la inversión de 21.000 millones de dólares, Trump puede continuar porque está declarada la declaración de emergencia nacional en la frontera, según informa el diario El País. La siguiente imagen demuestra que esta iniciativa no solo es celebrada por los pequeños.
Esta frontera entre Estados Unidos y México tiene más de 3.000 kilómetros que van desde el Pacífico hasta el Atlántico. A pesar del empeño de Donald Trump en separar ambos países, iniciativas como la de Ronald Rael ponen su granito de arena por debilitar el deseo del presidente estadounidense.