La inflación en Venezuela cerró en el mes de junio, con una variación de 24,8%, para una variación inflacionaria acumulada entre enero junio de 1.155% y para una inflación interanual es decir comparando el mes de junio del año 2018 con el mismo período de 2019, de 445.482%.
Al suministrar la información, desde la Comisión Permanente de Finanzas y Desarrollo, que elabora este índice ante la opacidad que se mantiene en el Banco Central de Venezuela, el diputado Ángel Alvarado, señaló que estos indicadores reflejan que el fenómeno inflacionario se mantiene en Venezuela, la hiperinflación continuará en el país, mientras estos números no bajen significativamente al menos por un año consecutivo.
Precisó que el impacto de la inflación en el poder adquisitivo del venezolano, es tan dramático, que el salario mínimo que hoy percibe, solo le permite comprar el 3,5% de la Canasta Alimentaria, señalando que el salario mínimo que están percibiendo los trabajadores venezolanos, sigue siendo un salario de hambre, advirtiendo que no se puede hablar de que se acabó la hiperinflación, mientras estos salarios sean así.
Recordó que se ha destruido la economía en casi un 40% en el primer semestre, mientras la hiperinflación, sigue estando allí, indicando que el reto que se tiene por delante, es cómo elevar la calidad de vida del trabajador, como lograr que el salario mínimo del trabajador pase de 6 dólares a 400 dólares o 500 dólares el salario mínimo.
“Estas son las políticas que se deben definir, por eso hemos insistido muchas veces, que las recetas que está aplicando el Gobierno, ni resuelven el problema de la inflación, tampoco la generación de riquezas, empleo, ni la generación de un salario productivo, y esto se debe a que ha tratado de abatir la hiperinflación, generando una restricción del crédito muy fuerte, que no resuelve el problema inflacionario, que hace más cara la vida del pobre y además contrae la economía y mantiene un salario completamente deprimido para los trabajadores”, dijo el parlamentario.
