El miembro más joven de la familia real británica, Archie Mountbatten-Windsor, fue bautizado durante una ceremonia familiar privada en el Castillo de Windsor.
El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, fue el encargado de bautizar al hijo de 2 meses de los duques de Sussex en una capilla privada en el castillo.
El pequeño vistió un ropón de encaje y satén que también utilizaron sus primos el príncipe Jorge, la princesa Carlota y el príncipe Luis.
Los padres, el príncipe Harry y Meghan, se han enfrentado a críticas por no permitirle al público asomarse al evento y negarse a revelar los nombres de los padrinos de Archie.
Archie nació el 6 de mayo y es el séptimo en la línea de sucesión para el trono británico.