Desde hace muchos años, los habitantes del municipio Palavecino han rechazado la denominada “revolución socialista”, implementada por el “comandante supremo”, Hugo Chávez y heredada por el régimen de Nicolás Maduro.
En 20 años, tres pupilos rojos han estado frente al mandato municipal: Aura Contreras de Rivero, Richard Coroba y Mirna Víes. Solo uno de la bancada opositora logró romper la secuencia chavista, José Barrera. Para los palavecinenses ninguno logró solventar los principales problemas que aquejan a los habitantes de esa jurisdicción.
Mirna Víes, sorpresivamente salió electa en las votaciones de alcaldes que se realizó el 10 de diciembre del 2017, y propuso que durante su gestión garantizaría la productividad, la paz, la seguridad alimentaria y los servicios públicos en Palavecino.
Ese planteamiento quedó solo en promesas. Mirna Víes, según los palavecinenses, es la alcaldesa más ausente que ha tenido el municipio. En año y medio de “gestión”, las principales avenidas de la jurisdicción se han deteriorado y en el transitar se observan las rumas de desechos, sacos y bolsas negras repletas de inmundicia. Pero uno de los principales problemas que presenta Palavecino ha sido la escasez de agua y los cortes desmedido de electricidad.
El expresidente de la comisión de servicios público de la alcaldía de Palavecino, Daniel Orellana, denunció que hay comunidades de esa jurisdicción que pasan hasta 15 días sin abrir el grifo de sus viviendas.
“El problema del agua en Palavecino se podría convertir en un problema de salud pública. La estación de bombeo El Carabalí tiene más de 15 días que no funciona y esto afecta a un gran porcentaje de la comunidad en el municipio”, detalló Orellana.
El dirigente del partido Voluntad Popular denunció que Palavecino es el municipio más castigado por el régimen chavista, en cuanto al racionamiento eléctrico se refiere.
“Desde el este de Barquisimeto hasta La Campiña, en Cabudare, casi en su mayoría, las zonas son castigados por más de 8 horas sin luz. Hay sectores que se la quitan hasta dos veces en el día. Esto es inhumano y no va a cambiar hasta que cese la usurpación en Venezuela”, enfatizó el ex concejal.
Orellana señaló que otra de las problemáticas que existe en la jurisdicción es la escasez de gas domestico, la acumulación de los desechos residenciales, la proliferación de moscas y ratas que ponen en peligro la salud de los ciudadanos, así como también el calvario para quienes viajan diariamente hacia Barquisimeto y deben hacer “maromas” para poder conseguir una unidad de transporte público en la calle.