La Copa América inició este viernes 14 de junio con el partido inaugural entre la selección local: Brasil y Bolivia. Los dirigidos por Tite lograron llevarse una victoria 3-0, aunque debieron esperar más de la cuenta para poder encaminar el juego hacia una victoria.
Como dato curioso, la selección brasileña vistió con una camiseta blanca con detalles en azul, color principal que no vestía desde el Mundial Brasil 1950, ya que en la final de este torneo la perdieron contra Uruguay en el denominado ‘Maracanazo’, y por cábala, decidieron no utilizarla porque -según los aficionados de Brasil- les traía una especie de maldición.
El partido estuvo dominado totalmente por los dirigidos por Tite, que desde el inicio del compromiso intentaron proponer y marcar. Pero la selección boliviana, dirigida por Eduardo Villegas, presentó un parado táctico sumamente defensivo y ordenado, apegándose a un 3-6-1, lo cual bloqueó los accesos de Brasil en los primeros 45 minutos.
En el segundo tiempo llegaron los goles para los locales, luego de que el árbitro Néstor Pitana se respaldara en el VAR para dictaminar una mano dentro del área y sentenciar un penal a favor de Brasil, el cual fue cambiado por gol por parte de Coutinho en el minuto 50.
Tres minutos después, al 53, Coutinho aprovechó un gran centro de Roberto Firmino y marcó de cabeza el segundo tanto para su selección, que les dio una tranquilidad importante. El partido cayó en un «bache», ya que Brasil no exigía y Bolivia no tenía argumentos para llegar al arco de Alisson Becker.
Hasta que al minuto 85, una genialidad del extremo de Gremio, Everton Soares, generara el tercer gol definitivo del compromiso. Resultó ser un gran gol por parte del joven de 23 años, quien encaró de izquierda hacia derecha, dejando rivales atrás y remató con gran precisión al palo más lejano para anotar su gol.
El próximo partido de Brasil será ante La Vinotinto el martes 18 de junio.
