Con suficiente descanso y vasta experiencia, los Warriors esperarán a su adversario en una nueva final de la NBA.
Por quinto año consecutivo, Golden State avanzó a la serie por el título de la liga, al imponerse el lunes 119-117 sobre los Trail Blazers de Portland en tiempo extra.
Draymond Green contabilizó 18 puntos, 14 rebotes y 11 asistencias, además de aportar un triple clave en la prórroga, lo que selló la barrida de Golden State sobre los Blazers en la final de la Conferencia del Oeste.
“Simplemente entendimos lo que podemos hacer en ambos lados de la cancha”, dijo Green. “Nunca dejamos de pelear, ésa es nuestra mentalidad”.
Stephen Curry añadió 37 tantos, 12 balones atrapados ante los tableros y 11 asistencias. Curry y Green son los primeros compañeros que logran triples dobles en el mismo partido de playoffs.
Los Warriors enfrentarán al ganador de la final del Este, entre Toronto y Milwaukee. Los Bucks lideran esa serie por 2-1 y disputarán este martes el cuarto duelo, en Canadá.
Golden State borró otro gran déficit, de 17 puntos. En el tercer partido se había recuperado de una desventaja de 18 unidades, y en el segundo había volteado una diferencia de 17.
“Hemos estado aquí antes. Hemos visto todo, todas las experiencias que se puedan imaginar. Así que nos basamos en esto”, comentó Curry.
Para el momento en que se realice el primer partido de la final de la NBA, los Warriors habrán descansado nueve días completos. La serie debe comenzar el 30 de mayo, en Milwaukee o Toronto.
Será la tercera vez en cinco viajes a la final que Golden State cuente al menos con una semana de reposo antes de la serie decisiva.
“Estoy contento por tener un poco de descanso antes de que juguemos de nuevo”, dijo el entrenador de los Warriors, Steve Kerr.
Varios más agradecen los días de pausa.
Los Warriors aseguraron la serie en Portland sin Kevin Durant, DeMarcus Cousins y Andre Iguodala, todos marginados por lesiones. No hay modo de saber si Durant y Cousins podrán disputar la final de la NBA.
Y otros jugadores de Golden State acarrean golpes y raspones.
Damian Lillard, quien jugó pese a sufrir una separación de costillas, totalizó 18 puntos y 12 asistencias por los Blazers. Falló un triple cuando el tiempo se agotaba en el alargue.
Meyers Leonard añadió 30 puntos, la mayor cifra en su carrera, además de interceptar 12 rebotes.