Director: Gerard McMurray Guion:James De Monaco
El gobierno le permite por 12 horas hacer lo que desea, sin castigo de la ley, sin twitter, sin redes sociales, radio, televisoras, sólo usted y su deseo de venganza, ira, libertad, ¿qué haría?
La Purga es un experimento que anuncia la Presidencia de EEUU en la cual, durante 12 horas los ciudadanos de Staten Island (el distrito más residencial del estado de nueva york, 500 mil personas) podrán cometer cualquier crimen y liberar sus inhibiciones de la forma que ellos elijan. Ofrecen $5000 (un aporte tipo bolsa de comida) a los residentes de la isla para quedarse en sus hogares durante el experimento y una compensación para los que participen también (otro bono, cosas del primer mundo). Los Nuevos Padres Fundadores de américa (en el film así se denominan) diseñan este experimento social con el fin de bajar la criminalidad, si funciona, lo harán una vez al año en todo el país.
Esta cinta, tiene un argumento realmente interesante. Nos hace plantearnos si en algún caso sería productivo aceptar una conducta social desviada con el fin de mantener una estabilidad económico-social, una depuración. Un estallido manipulado.
En la teoría del Triple Riesgo Delictivo (Santiago Redondo) observa que los delincuentes no son siempre personas con patologías mentales (como inicialmente se pensaba) sino que se tratan de personas comunes que aprovechan la oportunidad para delinquir, o bien porque se les presenta dicha oportunidad o bien porque al hacer un balance de riesgo/ganancia consideran que pueden correr dicho riesgo. En el film, es interesante observar como la población reaccionó inicialmente y como luego que el propio gobierno introdujo sus mercenarios (unos colectivos enmascarados ajenos a esa ciudad, rusos, extranjeros) su comportamiento inicial cambio.(Sin desperdicio este cambio de actitud)
Y aunque La Purga es una película de ficción, en agosto del 2014, hace unos años no más, en Louisville, Kentucky, una pequeña ciudad en Estados Unidos se anunció que ocurriría una purga y la población cayó en pánico producto del miedo y la ansiedad. Durante la primera quincena de ese mes, las calles de Louisville se llenaron de folletos en los que se informaba que el 15 de agosto ocurriría «la purga de Louisville». (En nuestro lenguaje seria; el 15 el 15 el 15 todos a la purga). Iniciaría a las ocho y media de la noche de ese viernes y terminaría a las seis de la mañana siguiente. La noche del viernes, los habitantes escucharon las comunicaciones de la radio local. En Twitter se mencionó el hashtag #louisvillepolicescanner más de cien mil veces (cualquier cosa llamen a la policía, traducción a lo Venezolano). No pasó nada y nadie dijo más luego de ese día.
En nuestros días he escuchado con atención la palabra Purga, el odio, venganza y cansancio hacen que ese mundo distopico (imaginario, indeseable) surja entre nosotros la idea no tan ficticiamente. La alegoría política actual está presente en esta película, un futuro sin ley podría parecer hasta una alternativa envidiable para muchos, esto no es nuevo, que las sociedades cansadas del hastió piensen en una caída y mesa limpia, en génesis 19, Sodoma y Gomorra hay algo de ello y el mismo Dios participó. Guardo distancia ante esta salida, no es un film nutritivo ni dichoso de frases y héroes que rescatar, más bien termina y deja el sabor de la contrariedad, si es por saber que es ficción o pudiese ser una anhelada realidad oculta de muchos. Usted dirá.
Fritz Márquez
@fritzmarquez360