Las anomalías congénitas son defectos de nacimiento.
Los defectos cardíacos congénitos o de nacimiento, afectan a cerca de 6.000 niños cada año, tan solo aquí en Venezuela, aplicando las estadísticas mundiales de que aproximadamente nace 1 paciente con un defecto cardíaco por cada 100 nacimientos vivos, y en nuestro país nacen aproximadamente más de 600.000 niños al año de acuerdo a nuestra tasa de natalidad de las cifras demográficas y del Ministerio Popular para la Salud.
Estas anomalías del corazón son consideradas como defectos de nacimiento y pueden afectar las estructuras intracardiacas, válvulas cardíacas, las paredes y tabiques internos del corazón, arterias y/o las venas que le llegan o salen de este.
Dependiendo de la estructura afectada, pueden manifestarse de variadas formas, desde un soplo cardíaco, que el flujo sanguíneo no circule apropiadamente a los pulmones y entonces ocurre la cianosis (“paciente morado”) o que el flujo vaya en la dirección equivocada o que la conducción nerviosa intrínseca esté completamente bloqueada, etc.
El doctor Carlos Troconis, cirujano cardiólogo del Grupo Médico Santa Paula (GMSP), señaló que del total de niños que nacen con estas cardiopatías, alrededor de 4.000 necesitaran cirugías o cateterismos intervencionistas durante los primeros años de vida. En cambio, con las cardiopatías adquiridas (enfermedades valvulares, endocarditis, miocarditis, etc.) se estima que un niño por cada 10.000 escolar-adolescentes requerirán una intervención.
Cirugía de corazón abierto
La operación de corazón abierto por lo general es cuando se aborda por el medio del pecho (esternón) y el paciente es conectado a una máquina corazón – pulmón artificial de circulación extracorpórea mientras se corrige sus defectos.
“Este aparato manejado por técnicos perfusionistas se encargan de derivar la sangre del cuerpo, circularla, oxigenarla como si fuera un pulmón artificial y retornarla para que llegue al cerebro y al resto del cuerpo, mientras estamos trabajando dentro del corazón, que lo “paralizamos” con una solución especial (cardioplejia) que lo inmoviliza totalmente, lo protege, y hacemos la operación de acuerdo al defecto que vayamos a corregir” agregó.
Estas cirugías, sirven también para reparar o reemplazar válvulas cardíacas afectadas, además de remediar los defectos congénitos. “Aquellas fallas que la naturaleza no les dio, tratamos de hacérselas, reformarlas o manipularlas para que quede lo mejor posible y lo más cercano a lo que naturalmente deben ser” afirmó el cardiocirujano.
Intervención exitosa
A comienzos de abril, la Unidad Cardio Quirúrgica Santa Paula del GMSP realizó una operación a corazón abierto, a un adolescente de 15 años al que le diagnosticaron desde pequeño, un problema conocido como Comunicación Interventricular (CIV) restrictiva, es decir, un hueco pequeño dentro del corazón.
“En un periodo de tres años, el joven fue desarrollando un prolapso e insuficiencia de la válvula aortica, una de las más importante del organismo, por lo que decidimos operarlo, sin esperar más tiempo” explicó Troconis.
En la Unidad Cardio Quirúrgica Santa Paula del GMSP se atienden a pacientes adultos y pediátricos, haciendo uso de modernos equipos de alta tecnología, para la evaluación y tratamiento de enfermedades cardiovasculares.
En la Unidad no Invasiva, situada en el piso 1 de la Torre de Consultorios del Grupo Médico Santa Paula, se evalúan estos pacientes y se efectúan electrocardiografía, ecocardiografía pediátrica y adultos, pruebas de esfuerzo, Holter de ritmo y MAPAS, manejo de arritmias cardíacas, entre otras cosas, así como imágenes cardiovasculares (Angio Tomografías, Score de calcio, etc.) de la mano de profesionales altamente calificados que brindan eficacia y calidad de Servicios con humanismo a sus pacientes.