Ideamos la columna para reseñar solo el 59º aniversario del 8 de mayo de 1965 de la incursión de Cuba a Venezuela por playas de El Cocal de los Muertos, divulgada como invasión a Machurucuto (Estado Miranda). Desembarcaron 8 guerrilleros repartidos equitativamente entre las dos naciones: Moisés Moleiro, Américo Silva y los hoy sobrevivientes Eduardo Ortíz Bucarán y Héctor Pérez Marcano, del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR); y los cubanos Raúl Menéndez Tomassevich, Ulises Rosales de Toro; Silvio García Plana y el médico de la misión, Harley Borges. El Partido Comunista (PCV), se había acogido a la paz democrática y continuaron en la Guerrilla los disidentes liderados por Douglas Bravo.
Otros 4 cubanos intentaron incorporarse, al naufragar la embarcación en la cual regresaban a la Isla, pero fueron capturados por el Ejército que causó muerte de dos.
La acción que causó revuelo internacional hizo declarar emergencia al gobierno constitucional que presidía Raúl Leoni y la llevó a la Organización de Estados Americanos (OEA) y a las Naciones Unidas (ONU). Ya la tiranía cubana había sido expulsada en 1962 por agredir militarmente a nuestra Patria, y los miembros de la Institución, a excepción de México, rompieron relaciones la Isla. Ahora el usurpador régimen de Maduro azota a la OEA y realizó una marcha para festejar su salida de la Institución. Para el maldado vicepresidente del Psuv, «Se ha convertido la OEA en el instrumento represivo más grande del imperialismo, instrumento de imposición de las decisiones de países lacayos».
No es la primera injerencia cubana. En su ensayo La Isla del Terror, el General Angel Vivas, víctima del castrista régimen, relata que Fidel desató plan para Venezuela. Da cuenta del decomiso d 4 cuantioso lotes de armas, para derribar su Democracia.
El 24 julio de 1966 se produjo la primera invasión patrocinada por Fidel, comandada por el venezolano Luben Petkoff. Arribó a playas de Tucacas, Falcón, con 14 militares cubanos, entre quienes sobresale el héroe de la revolución, Arnaldo Ochoa, en 1989 fusilado por tráfico de drogas.
Con el denominado Socialismo del Siglo XXI, el castrismo controla nuestra FAN a través de la sumisión de un alto mando, con el directo asesoramiento de Rusia y en cierta medida de China e Irán.
Así se está emulando la decisión de Fidel Castro del 26 de octubre cuando anunció la creación de las Milicias Nacionales Revolucionarias.
Evidente es la deserción de buena parte de dicha FAN, que el narco régimen recurre a la consigna del Comandante Castro cuando el 2 de enero 1959 consolidó la victoria de la Guerrilla de Sierra Maestra y marchó a la toma del Poder dejado por Fulgencio Batista: ¡Revolución, si Golpe de Estado no!
Entre los disidentes del narco régimen destaca el Gral. Manuel Cristopher Figuera, ex jefe del Sebin, quien se unió a la instaurada Operación Libertad. En carta al usurpador Maduro hace referencia a corrupción de funcionarios del régimen, a problemas internos del chavismo y al deterioro progresivo del país y, sobre esto último, dijo que “sería irresponsable culpar por ello solo al imperio norteamericano”.
Demostrada está la polarización de los sectores: Operación Libertad y el narco régimen, que a decir del camarada Ministro de la Defensa apadrinado por el castrismo, amenaza combatir con las armas la permanencia en el Poder. Contra su actuación se manifiesta el mundo democrático y el afecto de 6 familiares, incluida su progenitora, Carmen Oneida López quienes se expresan en un vídeo por las redes sociales. Le piden que cese el ataque a las personas que se movilizan en apoyo a la Operación Libertad.
Al MARGEN. El Presidente interino Juan Guaidó llama a paros escalonados, para culminar con una huelga general. Si revisamos las estadísticas, esto ya está en práctica con el cierre de las empresas privadas. El único patrón en relativa actividad es el usurpado régimen.
Alberto Jordán Hernández