En 1636, funcionaba en un solar de la cuadrícula colonial de Nueva Segovia de Barquisimeto una capilla bajo la advocación de Nuestra Señora de la Purificación de la orden Franciscana. Con el paso del tiempo, los franciscanos fueron dándole características de templo a la pequeña edificación que después se constituyó en un edificio hasta que en 1812 la denominada iglesia de San Francisco de Asís, quedó reducida a escombros debido al impactante terremoto que también dejó en el suelo las casonas neosegovianas.
Datos de finales del siglo XIX, contenidos en el Diccionario Histórico, Geográfico, estadístico y Biográfico del estado Lara, revelan qué esta edificación fue levantada sobre los cimientos de la anterior construcción realizada por los religiosos de la orden de San Francisco.
Abandonada la fabricación del templo en predios que pertenecía a los bienes del Colegio Nacional por Decreto del Ejecutivo, el gobernador Dr. Juan de Dios Ponte, (nacido en Cabudare) se dirigió al Gobierno Nacional, para solicitar se levantase en aquel sitio un templo, “de que carecía la ciudad”, que solo contaba por entonces con el de Altagracia.
La petición del gobernador Ponte le fue concedida procediendo entonces a proseguir la construcción del templo apoyado por la generosidad de los vecinos. Pero reemplazado el gobernante a finales de 1841, quedó paralizada la fábrica hasta 1851, retomada por Martín María Aguinagalde, nuevo mandatario de la región, quien “consagró todos sus esfuerzos a la conclusión del edificio”.
EN RECUADRO
El Dato: Para 1883, el municipio Catedral de Barquisimeto, constaba de 2.335 casas y 14.037 habitantes
No obstante, tras la Conspiración del 12 de julio de 1854, donde fue asesinado el gobernador Martín María Aguinagalde, fueron suspendidos los trabajos de esta iglesia por algunos años hasta que el presbítero doctor José María Raldiris y su hermano Mariano J. Raldiris, con apoyo de las autoridades gubernamentales y los vecinos, lograron la concreción del ambicioso proyecto.
Consagrada en Semana Santa
El nuevo templo fue consagrado por el Ilustrísimo Señor Arzobispo de Caracas y Venezuela Silvestre Guevara y Lira, el sábado Santo 15 de abril de 1865, “con destino a Parroquia de Nuestra Señora del Carmen, servida desde su consagración por el cura Señor Doctor José María Raldiris, hasta su fallecimiento en marzo de 1881”.
Desde 1869 sirve este templo de iglesia Catedral del Obispado de Barquisimeto y según las crónicas del entonces, “era un edificio que aunque escaso de adornos, llama la atención por su belleza y sólida construcción”.
Polvo y escombros
El 3 de agosto de 1950 el terremoto de El Tocuyo causó severos daños al templo franciscano, que en escasos minutos solo dejó polvo y escombros. De lo que poco sufrió fue la torre del campanario construida en 1884 y el reloj que data de 1888.
Debido a los daños el Ministerio de Obras Públicas decidió demoler la antigua edificación y ante la oposición de la ciudad, al final el viejo templo fue de nuevo reconstruido aunque ya se había decidido levantar una nueva catedral.
Mientras reparaban a San Francisco y construían la nueva iglesia, por poco tiempo sus responsabilidades litúrgicas pasaron al templo de la Inmaculada Concepción.
Como resultado del Terremoto de 1950, se realizó la última refacción de consideración a la catedral barquisimetana. Del templo original queda hoy el campanario y las paredes perimetrales este y oeste.
Es una iglesia de tres naves y fue necesario remozar y rehacer la fachada tal cual era antiguamente. El templo está construido con pilastras de columnas cilíndricas, de orden toscano y concreto martillado. La escala del campanario no se ajusta al cuerpo de la iglesia, esto debido a sus múltiples intervenciones.
En 1960, la iglesia San Francisco de Barquisimeto, fue declarada monumento histórico nacional, según decreto 26320, junto con su colección de objetos religiosos.
Luis Alberto Perozo Padua