El miércoles 27 de marzo, Fabiana Rosales, esposa del presidente (E) de Venezuela, Juan Guaidó, visitó la Casa Blanca de los Estados Unidos para reunirse con el presidente Donald Trump, el Vicepresidente Mike Pence, y otros funcionarios del gobierno norteamericano.
Dicha visita de Fabiana a los EE.UU. fueron con el fin de seguir reuniendo el apoyo internacional en busca de la destitución del Nicolás Maduro.
«Hoy en Venezuela, se trata de libertad o dictadura, de vida o muerte», dijo Rosales al inicio de su reunión. Asimismo, aseguró que los niños son los que más sufren las consecuencias.
«Nuestros niños mueren porque no hay luz, porque no hay comida, y nuestra gente se está muriendo también en los hospitales. Esto no puede continuar», dijo Rosales.
Seguidamente, indicó que teme por la vida de su esposo, Juan Guaidó, puesto que el pasado martes 26 de marzo sufrió un atentado, cuando el auto donde se trasladaba fue atacado con gases lacrimógenos.
Por otro lado, Trump indicó que “ella (Fabiana) ha pasado por algo muy duro”, mientras que Mike Pence se refirió la denominó como “la primera dama de Venezuela” e indicó que era “un honor” recibirla en la Casa Blanca.
Asimismo, los líderes condenaron la presencia de militares rusos en Venezuela y lo catalogaron como una “desafortunada provocación”.
“Hoy llamamos a Rusia a detener todo su apoyo al régimen de Maduro, respaldar a Juan Guaidó y mantenerse del lado de las naciones en todo el continente hasta que se restaure la libertad”, dijo Mike Pence.