En la oficina de la representante demócrata por el distrito 26, Debbie Mucarsel Powell en Miami, venezolanos exiliados piden que se cumpla con una profundización ante las sanciones de la dictadura específicamente que EE.UU. deje de adquirir petróleo procedente de Venezuela.
El encuentro estuvo convocado por la congresista para abordar el tema del Estatus de Protección Temporal (TPS) para exiliados venezolanos, nicaragüenses y hondureños. Donde comunicó que “La crisis humanitaria que vive Venezuela no solo afecta a los habitantes de ese país sino a toda la región”.
Se conoce que Powell se centrará en la ayuda humanitaria destinada a organizaciones no gubernamentales de Venezuela, con el fin de alguna manera, cumplir con las necesidades más especificas que atraviesa actualmente la nación.
Sin embargo, Jose Antonio Colina, presidente de la organización Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex), argumentó que es “incongruente decir que en Venezuela hay una dictadura, y al mismo tiempo, deportar a los venezolanos”.
El activista propuso que se expida una ley que “permita congelar los fondos y bienes de las personas del régimen que viven en Estados Unidos». Además aseguró “que las empresas petroleras estadounidenses están sosteniendo a la dictadura”.
